Activismo en diabetes tipo 2 en Escocia y Londres: Ken Tait


 2022-08-29

La comunidad de diabetes en línea es variada y diversa. Podemos encontrar, en los distintos países del mundo múltiples activistas que dan voz a las experiencias de vivir con enfermedades no transmisibles (ENT) y condiciones crónicas como la diabetes.

Sin embargo, en este grupo, aún podemos notar a simple vista la falta de miembros que porten la voz de las personas que viven con la diabetes tipo 2. Ken Tait, escocés residente en Londres, rompe este patrón y acude a cada evento en representación de los viven con esta condición de salud.

Lo entrevistamos y nos gustaría que tú también lo conocieras.

QUIEN ES KEN TAIT

¿Quién soy yo? Soy Ken Tait. Soy originario de Edimburgo, Escocia y vivo en un lugar llamado Bromley, en Londres. Soy un activista de la diabetes. Hoy en día a nivel internacional. También hablo a nivel local, así que se trata de la diabetes y especialmente de las personas con diabetes de tipo 2, porque yo vivo con ella y por eso me interesa mucho.

Me diagnosticaron en marzo de 1999, aunque mi médico de cabecera de entonces dice que creía que llevaba viviendo con diabetes desde hacía al menos dos años, pero la fecha de mi diagnóstico fue en 1999. Casi  un cuarto de siglo.

EL MAYOR RETO EN LA VIDA CON DIABETES TIPO 2

Creo que mi mayor reto es conseguir el apoyo que necesito. Estoy en tratamiento con insulina, y lo he estado desde el principio. La mayor parte de la información que tengo hoy día ha venido de personas con diabetes tipo 1 y con diabetes tipo 2. 

El mayor reto es no conseguir el apoyo de mis propios profesionales de la salud en la forma de tratar de entender lo que realmente estoy pasando.

SOY UN PSICOTERAPEUTA CON DIABETES TIPO 2

La elección de mi profesión no fue consecuencia de la diabetes, pero desgraciadamente, el diagnóstico ocurrió al mismo tiempo en el que me convertía en psicoterapeuta en 1999.

Era simplemente algo que quería hacer cuando estuviera retirado, cuando quisiera retirarme. Pero resultó que lo hice mucho más rápido. Así que la diabetes no tuvo un impacto, realmente. Simplemente se convirtió en parte de mi vida.

 Fue especialmente útil ser psicoterapeuta para procesar mi primera inyección. 

Como la mayoría de la gente, dudas cuando lo intentas, cuando te dicen: “Bueno, te vas a poner eso en el estómago”, y piensas, ¿en serio?… es ese tipo de miedo.

Pero entender el miedo y entenderlo todo ayuda. Así que eso es probablemente donde puedo ayudar más a la gente. Eso hago y los ayudo en otras áreas también.

EL ACCESO AL TRATAMIENTO Y A LA MEDICACIÓN EN ESCOCIA Y GRAN BRETAÑA

Es bastante fácil conseguir la medicación. Es gratis porque es del Sistema Nacional de Salud. Bueno, es más o menos gratis, porque pagamos a través de los impuestos. Las herramientas tales como medidores continuos de glucosa o el seguimiento de flash para las personas con tipo 2 no están disponibles para nosotros. Aparte de tener que pagar por nosotros mismos, no hay apoyo real de los profesionales de la salud. Así que es para tu propia educación, no para nadie más.

El año pasado decidí probar por mi cuenta un medidor continuo de glucosa porque quería saber de qué estábamos hablando en las redes y ver qué pasaba. Así que durante cuatro meses me autofinancié. Cuando vi a mi médico de cabecera por otra cosa y le mostré de qué se trataba, no tenía ni idea de lo que estaba viendo. Y eso que se supone que es la médico de cabecera que tiene la diabetes en su haber, como quien dice. 

Y me di cuenta de que ninguna persona con diabetes había recibido formación alguna en el distrito londinense de Bromley sobre lo que puede hacer un medidor continuo de glucosa. Así que, en cierto modo, me desconcertó. 

CAMPAÑAS EN DIABETES

Mi propia campaña trata de conseguir que las personas con el tipo 1 y otros tipos nos acepten a todos como un solo grupo en lugar de grupos separados.

Hay 537.000.000 de personas con diabetes en el mundo. El 90% de nosotros tiene diabetes tipo 2. Supuestamente tenemos la voz más grande, pero no es así. Tenemos la voz más silenciosa de todas. Y eso tiene que cambiar, porque trabajando juntos podemos cambiar a los gobiernos, podemos cambiar el pensamiento.

EL ESTIGMA DE LA DIABETES TIPO 2 

(SHAME, TECHNOLOGY, INSULIN, GUILT, MEDIA, ACCEPTANCE)

El estigma lo hice con un anagrama. Se llama vergüenza (shame en inglés, primera letra de “stigma”), porque nos avergüenza tener diabetes. La “t” es la tecnología, que no conseguimos. La I es la insulina, que se utiliza como una amenaza y no como una forma real de controlar o gestionar la diabetes. La “g” es la culpa (guilt). Lidiar con ese sentimiento de culpa, fue mi culpa. Me lo hice a mí mismo.

No. Nunca lo hiciste. La “m” son los medios de comunicación que tenemos que conseguir, las redes sociales y todo lo demás. Dar voz a esta condición de salud. No decir que todo es levantarse del sofá y hacer dieta y “estarás bien”. Es importante contar con la aceptación de todos.

He escuchado a personas que tienen diabetes tipo 2 cuando acuden a un profesional de la salud, se les dice, bueno, “no lo estás haciendo muy bien, ¿verdad?” Obviamente no estás haciendo las cosas bien, pero no saben lo que le pasa a esa persona, y entonces utilizan la amenaza: si no te comportas o haces las cosas bien, entonces te voy a poner insulina. 

Así que la insulina se convierte en “la mala”.

Elegí la insulina en el año 99 porque pensé que era el camino a seguir. No hay otro camino. Pensando en mí en ese momento, no había mucho en internet, como se podría decir, y como probablemente los lectores saben, que si estás pasando por estrés, ansiedad y depresión hacen malas migas con las personas con diabetes, cualquier tipo de diabetes.

El círculo vicioso de la diabetes y la salud mental

Hay un dicho que tenemos: si tienes depresión, ansiedad y estrés, entonces es probable que tengas diabetes. ¿Y adivina qué pasa cuando tienes diabetes? Tienes depresión, ansiedad y estrés.

ESCRITO POR Lucía Feito Allonca de Amato, PUBLICADO 08/29/22, UPDATED 09/01/22

Lucy lleva 30 años viviendo con diabetes tipo 1, tiene doble nacionalidad española y argentina y es Licenciada en Derecho por la Universidad de Oviedo. Es educadora en diabetes por la IDF, paciente experto en enfermedades crónicas cardio-metabólicas por la Universidad Rey Juan Carlos y apasionada defensora de la diversidad, equidad e inclusión.