¿Bromear con diabetes? en algunos casos no está bien.
El Día Mundial de la Diabetes es el día del año en el que siento que tengo más trabajo. Todos quieren hablar diabetes una vez al año y, tristemente, se olvidan el resto. Poco a poco esto va cambiando pero, todavía tenemos mucho mucho trabajo. Es justo este mes donde me invitan con mayor frecuencia a dar charlas en diferentes sitios y entrevistas en distintos medios. ¡Amo mi trabajo y esas dos cosas las disfruto enormemente!. Además, el aprendizaje que traigo luego de todas esas entrevistas es muy grande y estoy segurísima, me ayuda a ser mejor persona y a preparar mejor mis respuestas.
Promoviendo la Convivencia Sana
A quienes vivimos con diabetes se nos olvida que a pesar de que todo el planeta ha escuchado el término “diabetes” al menos una vez por semana, no es obligación de nadie, salvo de nosotros que vivimos con esta condición, saber todo al respecto. No es obligación de los humanos del mundo saber qué cosas se pueden decir y qué cosas, qué temas tratar y qué temas no y por supuesto tampoco es su obligación utilizar un lenguaje adecuado. Hoy haremos una lista de convivencia sana. Sí, sí, porque pegar de gritos no es siempre útil y aveces es buena idea dejarle saber al resto, discretamente, compartiendo un post como este, lo que queremos y lo que no queremos escuchar.
1. “Ay, si sigo comiendo me volveré diabético”: todos los días, desde que mi hijo juega futbol, (o sea hace muchos años) escucho este al menos una vez al día. No, personas, comer así no los volverá “diabéticos”. Los llevará a aumentar de peso, eso sin duda, y si a esto le agregan otras cosas como antecedentes genéticos, sedentarismo, que somos mexicanos, y otros factores unos modificables y otros no, seguramente aumentarán su riesgo de desarrollar diabetes tipo 2.
Lo realmente grave, es que creemos que no importan este tipo de comentarios. Es como si yo anduviera por el mundo diciendo algo como “ay, dejaré de brincar en un sólo pie o me volveré inválido” junto a alguien que no tiene forma de caminar. ¿De mal gusto Mariana? ¡De pésimo gusto! La gente cree que con el tema de diabetes se puede bromear.
Una playera que diga “19 de septiembre día que me hice diabético” dijo un atinado reportero mexicano. ¿Quién les dijo que bromear con una condición de salud era simpático, o chistoso? NO, no se puede, es hiriente y nos molesta muchísimo. Evítenlo.
2. “El vecino de mi abuelito quedó ciego luego de….”: Me han acaso escuchado decirles cosas absurdas como “el vecino de mi abuelito quedó loco por casarse con una mujer como la tuya” ¿no verdad? Pues es más o menos lo mismo. Si no tienen nada bueno que comentar, o aportar por favor evítenlo, es de muy muy mal gusto.
3. Preguntar está padre, pero ¡cuidado!: Una vez en casa de mi abuela alguien seriamente me preguntó en mi avanzado estado de embarazo algo como “oye, y tu hijo también será diabético”? ¡Dios mío! ¿Dónde está el sentido común de esta gente?
Comprendo que no tendrían porqué saber que la diabetes tipo 1 tiene factores de riesgo genéticos y hereditarios, que son pocos pero que los hay pero…la forma en la que hacemos preguntas y las situaciones en las que las hacemos habla mucho de nosotros como personas. Jamás me atrevería a preguntarle a esa misma persona algo como “oye, y tu hijo será igual de feo que su papá”? Insisto, es más o menos lo mismo pero en el tema de diabetes todos creen tener permisos.
Habiendo expuesto lo anterior, aquí un pequeño reglamento.
1. No hagas preguntas hirientes, si mueres de curiosidad busca en internet
2. No cuentes historias de abuelitos, vecinos y tíos que murieron trágicamente
3. Cuidado, el término diabético NO es aceptado por todos nosotros
4. No sugieras tratamientos, para eso tenemos un equipo de profesionales al cuidado de la salud
5. ¡Prohibido hacer chistes sobre diabetes estando nosotros cerca! Enserio, se los pedimos.
Los invito a leer este texto que habla también al respecto. No, no soy la única a la que le molesta.
Y a ustedes ¿qué les ha tocado escuchar?