Disfunción eréctil y diabetes


 2022-09-15

La disfunción eréctil (DE) es un problema común para los hombres que tienen diabetes, pero no es inevitable.

¿Qué es?

La disfunción eréctil es la incapacidad de tener o mantener una erección lo suficientemente firme para tener relaciones sexuales y es común en hombres que tienen diabetes, tanto tipo 1 como tipo 2. 

Los hombres con diabetes tienen 3 veces más probabilidades de presentar disfunción eréctil. 

La edad es el factor de riesgo número uno para tener problemas de erección, pero en el caso de la diabetes, el envejecimiento prematuro de los tejidos conduce a que este tipo de problemas se produzcan antes.

Puede deberse al daño de los nervios y vasos sanguíneos, causado por un mal control de la glucosa en sangre a largo plazo.

La disfunción eréctil también puede estar relacionada con otras afecciones comunes en los hombres con diabetes, como la presión arterial alta y las enfermedades cardíacas. La disfunción eréctil puede ocurrir antes en hombres con diabetes que en hombres que no tienen la enfermedad. La dificultad para mantener una erección podría incluso preceder al diagnóstico de diabetes.

Pero primero tenemos que decir lo que la disfunción eréctil NO es:

  • Problema ocasional para lograr una erección.
  • Menos interés en el sexo. La disfunción eréctil sucede cuando un hombre quiere tener relaciones sexuales, pero no puede lograr o mantener una erección.
  • Problemas de eyaculación, que puede significar un problema estructural con el pene.

Por ese motivo, si tienes dudas, puedes consultarlo simplemente realizando este pequeño test .

Acciones positivas

Tener disfunción eréctil puede ser un verdadero desafío y por eso la primera medida es hablarlo con tu médico o un especialista.

  • Dile al médico lo que está pasando. El médico considerará las causas subyacentes y puede brindarte información sobre medicamentos y otros tratamientos.
  • Pregunta si hay algo que puedas hacer para controlar mejor tu diabetes. Mejorar tus niveles de glucosa en sangre puede ayudar a prevenir los daños a los nervios y a los vasos sanguíneos que pueden provocar la disfunción eréctil.
  • Pregunta acerca de otros problemas de salud. Otras afecciones crónicas pueden causar o empeorar la disfunción eréctil.
  • Controla tus medicamentos. Pregúntale al médico si estás tomando algún medicamento que pueda empeorar tus problemas de erección y cambiarlos puede ayudar.
  • Busca asesoramiento psicológico. La ansiedad y el estrés pueden empeorar la disfunción eréctil. Un psicólogo, un consejero u otro especialista en salud mental pueden ayudarte a ti y a tu pareja a encontrar formas de afrontar la situación.

Buenas elecciones de estilo de vida:

Algunos cambios en tu estilo de vida pueden mejorar la disfunción eréctil y tu salud general:

  • Dejar de fumar.
  • Perder peso.
  • Incorporar la actividad física a tu rutina diaria.
  • Limitar el consumo de alcohol.

Opciones de tratamiento

Existen distintos tratamientos posibles para la disfunción eréctil y el médico es quien mejor podrá decirte cuál de estas opciones es la mejor para ti:

  • Medicamentos orales. Los medicamentos para la disfunción eréctil incluyen sildenafil (Viagra), tadalafil (Cialis, Adcirca), vardenafil (Levitra, Staxyn) o avanafil (Stendra). Estas píldoras pueden ayudar a facilitar el flujo sanguíneo al pene, lo que hace que sea más fácil lograr y mantener una erección. Consulta con tu médico para saber si son una opción segura para ti.
  • Testosterona. Algunas veces tener niveles bajos de testosterona puede causar disfunción eréctil. Los hombres con diabetes tienen dos veces más probabilidades de tener testosterona baja que los hombres que no tienen diabetes. Tomar o usar testosterona podría ayudar a tener erecciones normales o a que el medicamento para la disfunción eréctil funcione mejor, pero también aumentar las hipoglucemias y aumentar la presión arterial. Consulta con tu médico para saber si es una opción segura para ti.
  • Otros medicamentos. Si las píldoras no son una buena opción para ti, tu médico podría recomendarte un supositorio pequeño que se inserta en la uretra antes de tener sexo. Otra posibilidad es un medicamento que se inyecta en la base o en un lado del pene. Al igual que los medicamentos orales, estos medicamentos aumentan el flujo sanguíneo que ayuda a conseguir y mantener una erección. Consulta con tu médico para saber si son una opción segura para ti.
  • Dispositivo de aspiración al vacío. Este dispositivo, también llamado bomba de pene o bomba de vacío, es un tubo de plástico que se ajusta sobre el pene, creando un vacío de baja presión que causa una erección. Una banda colocada en la base del pene mantiene la erección después de retirar el tubo. Este dispositivo manual o de batería es fácil de usar y tiene un bajo riesgo de problemas.
  • Implantes peneanos. Cuando otros tratamientos no funcionan, un implante de prótesis en el interior del pene podría ser una opción. Los implantes de pene semirrígidos o inflables son una opción segura y eficaz para muchos hombres con disfunción eréctil.

Conclusión

La disfunción eréctil es algo normal y no hay que tener vergüenza en consultar a un especialista. Además de tener un adecuado control metabólico, es fundamental hablarlo con tranquilidad con la pareja y consultar a un especialista si esta situación se produce.

Iñaki Lorente ha dicho que “No hay que rendirse nunca. Al final lo que ocurre es que, para no enfrentar la situación, se evitan las relaciones sexuales y se acaba perdiendo el deseo sexual”.

Esta segunda opción no debería ser la que escojas. Como has visto, hay multitud de soluciones y lo primero es consultar a un especialista.


Nota: Este contenido es meramente informativo y no tiene por objeto reemplazar el asesoramiento médico. Si tienes dudas, es importante solicitar una consulta con tu médico para realizar una valoración y recibir el tratamiento más adecuado para ti.

ESCRITO POR Ana Álvarez Pagola (Borthwick) , PUBLICADO 09/15/22, UPDATED 10/11/22

Ana es la creadora de Yo Diabetes y vive con diabetes tipo 1 desde 2006. Es docente, y traductora, paciente experto en enfermedades crónicas por la Universidad Rey Juan Carlos y educadora en diabetes. Forma parte activa de la comunidad de diabetes en línea en las distintas plataformas buscando difundir información sobre diabetes que permita a más personas gestionar mejor su diabetes y los recursos disponibles. Es la orgullosa mamá de cuatro maravillosas personas.