Qué esperar durante una estancia hospitalaria si vives con diabetes tipo 1


 2018-02-14

Nota del editor: Kyla Schmieg (BSN – título de grado en enfermería, RN – enfermera registrada), es una enfermera en endocrinología pediátrica que trabaja en Cincinnati, OH, EE. UU., y tiene diabetes tipo 1. Ella trabaja en la misma unidad donde se le diagnosticó hace 26 años.


Prepararse para una estadía en el hospital puede ser abrumador para cualquiera. Esa preparación cuando se vive con con Tipo 1 hace que surjan más preguntas tales como el manejo de los niveles de glucosa en sangre y las dosis basales de insulina. Saber qué esperar y qué cosas llevar puede ayudarte a sentirte más preparado y más seguro con respecto a tu estadía.

¿Cómo prepararte?

  1. Habla con tu endocrinólogo. Ellos son la mejor fuente cuando se trata del manejo de tu diabetes mientras estás en el hospital. Déjales saber la razón de tu estadía y el tiempo del procedimiento. Te darán un plan a seguir para la noche antes y el día del procedimiento para ayudarte a ajustar el ayuno que se requiere antes de la operación.
  2. Habla con el médico que realizará el procedimiento. Comparte el plan que tú y tu endocrinólogo hagan. Pregúntale qué puedes esperar sobre el tipo de cuidado que brindan en el hospital cuando hay un paciente con diabetes tipo 1. (Un poco más de información sobre esto se describe más adelante). Te sentirás mejor mientras más preguntas hagas.
  3. Si eres tú quien estará programando el procedimiento, asegúrate de que el planificador con el que estás hablando sepa que el paciente vive con diabetes tipo 1. Lo más probable es que te programen para primera hora de la mañana. Esto es para evitar cualquier problema relacionado con el ayuno que se hace antes de la mayoría de los procedimientos. Normalmente, este es un ayuno de 8 horas.  Así que si una persona con diabetes está en ayunas durante un tiempo cuando normalmente duermen, esto tiende a afectar menos sus niveles de azúcar.

Visitas internas versus externas

Hay dos tipos de visitas al hospital, visitas de pacientes internos y externos. Las visitas de  pacientes externos se refieren a las que duran menos de 24 horas. Las visitas de pacientes internos se refieren a las que duran 24 horas o más. Este tipo de visitas se abordan diferente en términos del tipo e intensidad del cuidado sobre la diabetes que el hospital brinda.  

En una visita externa, el hospital solamente se enfoca en el procedimiento específico (es decir que ellos realizan el procedimiento, luego permaneces por una hora o dos y entonces te vas a casa). Para este tipo de visita, el equipo de cuidados revisará tu azúcar en la sangre y solo intervendrá o hará ajustes en tus rangos si es absolutamente necesario.   

En visitas de pacientes internos, hay diferentes escenarios que pueden ocurrir dependiendo del área en la que vas a permanecer. Si fuera un área no pediátrica, te podrían dar la opción de que puedas hacer todos tus cuidados diabéticos por tu cuenta.  En este caso debes firmar una exoneración que declare que este es el plan y que estás de acuerdo con él. Si fuera un área pediátrica, lo más probable es que renuncies un poco al control de tu diabetes mientras que estés en el hospital.

¿Qué debes llevar contigo?

  1. Tu propio dispositivo de lancetas y agujas, Las que están en el hospital son HORRIBLES. Si tienes hijos pequeños, ellos apreciarán que los lleves. Los hospitales tienen sus propios medidores que tienen que usar para las lecturas pero puedes usar la lanceta de tu preferencia.
  2. Tu monitor. Algunos hospitales tienen la capacidad de descargar tu medidor y ver tus resultados. Esto puede ayudarles a ver cómo corre tu azúcar en la sangre en ciertos momentos del día. Si no lo traes, no hay problema.
  3. Tus dosis de insulina y proporciones de carbohidratos. Lo más probable es que, mientras estés hospitalizado, el plan del hospital será usar el régimen que usas en casa.
  4. La bomba y el MCG.  (más adelante se dará más información sobre cómo los hospitales administran las bombas y las inyecciones).
  5.  Refrigerios sin carbohidratos. (Para estadías de pacientes internos) Esto es para que tengas algo qué comer entre las dosis de insulina en lugar del queso en tiras y la gelatina sin azúcar.

¿Qué puedes esperar durante tu estadía?

La meta número uno para todas las personas con diabetes es tener un estricto control del azúcar en la sangre. Esto es muy importante en el ámbito hospitalario ya que un control de este tipo puede facilitar la recuperación. Tal como se mencionó anteriormente, hay unas cuantas diferentes opciones sobre quién hace qué en términos de los cuidados de la diabetes. Para esto me estaré enfocando en el plan en el que el hospital brinda la mayoría de los cuidados diabéticos.

Durante la anestesia, velar por tu azúcar en la sangre será la responsabilidad de tu anestesiólogo. Aunque sea un procedimiento corto, puedes solicitar que midan tu nivel de azúcar. Es común permitir que las personas que son diabéticas tengan niveles más altos durante los procedimientos, lo cual es fácil de corregir después del procedimiento. Si tu nivel es bajo durante el procedimiento, hay medicamentos que están disponibles para darte por vía intravenosa para aumentar rápidamente tu azúcar en la sangre. Ninguna persona con diabetes se somete a un procedimiento sin un medicamento intravenoso. En algunos casos, te podrían poner un fluido intravenoso que contenga dextrosa (una forma de azúcar) hasta que ya puedas comer. Si este fuera el caso, tu nivel de azúcar sería revisado periódicamente y el ritmo al que la dextrosa intravenosa fuera administrado podría ajustarse con base en lo que indique tu nivel.

Después de que tu procedimiento termine y puedas comer, el bolus de insulina empezará a compensar. Lo primero que necesitas saber es que en el ambiente hospitalario la insulina se considerada como un medicamento de ALERTA MÁXIMA. Esto significa que cada vez que se administra insulina, se requieren dos enfermeras para verificar la dosis y firmar para aprobar la administración del medicamento. (Esto no es porque las enfermeras no confíen en que tú o tus familiares te den la dosis correcta de insulina, es sólo su política). Si estás usando inyecciones, puedes optar por inyectarte tú mismo una vez que la dosis sea verificada.

Con respecto a los portadores de bombas, hay diferentes escenarios que podrían presentarse en tu estadía en el hospital. Otra vez, el caso en el que se enfoca es en el que el hospital se haría responsable por los cuidados de tu diabetes. Si tienes una bomba, lo más probable es que te pidan que no la uses y que te den una del hospital. También te pueden pedir que firmes una declaración que diga que estás de acuerdo en no tocar la bomba mientras estás allí. (Esto es porque el personal del hospital está entrenado para usar las bombas del hospital y esto le permite ser capaces de verificar que el flujo de insulina sea exacto). Aunque uses la misma marca y modelo de bomba que usan en el hospital, aun así lo más probable es que te pidan que uses la del hospital.

Si quieres involucrarte más en tus cuidados, háblalo. Si quieres hacer tus propios  cambios o ponerte tú mismo tus inyecciones o pincharte tú mismo tus dedos, sólo dilo. Además, es buena idea verificar tus dosis de insulina con la enfermera antes de que te las den. Te pueden explicar el conteo de carbohidratos y el rango utilizado para cubrir los carbohidratos y también el factor de corrección utilizado.

La cosa más importante que deberías hacer durante tu estadía es asegurarte de que se involucre un endocrinólogo en tus cuidados. Para los pacientes externos, tener ese plan que discutiste con tu endocrinólogo es una parte importante para asegurarse de que las cosas saldrán bien. Para pacientes internos, durante la admisión al hospital, asegúrate de pedir una consulta con un endocrinólogo. Esto significa que un endocrinólogo será parte de tu equipo de cuidados mientras que estás en el hospital. También puedes solicitar que un equipo de endocrinología sea quien haga los cambios o ajustes al régimen de diabetes del paciente. Con frecuencia esto conduce a un mejor control del azúcar en la sangre durante las hospitalizaciones.

ESCRITO POR Kyla Schmieg, BSN, RN , PUBLICADO 02/14/18, UPDATED 08/04/22

Kyla Schmieg, BSN (título de grado en enfermería), RN (enfermera registrada), trabaja actualmente como enfermera registrada en endocrinología pediátrica en Cincinnati, Ohio. Ella fue diagnosticada con diabetes tipo 1 en 1990. A ella le encanta que su trabajo le permite trabajar con niños y familias con nuevos diagnósticos de diabetes tipo 1. A ella le encanta educar a la gente acerca de la diabetes; ¡es la razón principal por la que se convirtió en enfermera! Ella también cree que es importante difundir que a pesar de que la diabetes tipo 1 tiene que ser tomada en serio, no es algo que debería afectar o limitar tus sueños o ambiciones.