Henry y Tako Taco
Mi nombre es Henry Jensen y tengo diabetes tipo 1. Me dio esta enfermedad cuando tenía 5 años. Recuerdo que estuve en el hospital por tres días. ¡Tenía miedo y yo dije “¡Guácala! ¡Una pizza fea de hospital!” Y cuando trataron de poner la aguja en mi mano, dije “¡No! ¡No hagan esto!” Yo gritaba y lloraba, quería que se detuvieran.
Las cosas han cambiado desde entonces porque no me tienen que inyectar tantas veces como cuando me diagnosticaron con diabetes tipo 1, ya que ahora tengo una Omnipod (una bomba de insulina). También tengo un Dexcom (un monitor de glucosa). Antes la situación era ¡pinchazo en mi dedo! ¡Pinchazo en mi dedo! ¡Pinchazo en mi dedo! ¡Inyección en mi estómago! ¡Inyección en mi brazo! ¡Inyección en mi nalga! Las cosas son un poco más fáciles ahora.
A veces me siento mal cuando mi nivel está debajo de 60. Algunas veces baja REALMENTE rápido. ¡De un solo! Una vez mi nivel bajó bastante y me aplicaron glucagón en la escuela, me dio mucho miedo. ¡Era demasiado! Me dolió y yo gritaba. Pensé que podría morir. Mi amigo Sam me llamó y me dijo que estaría bien. Me dijo que encontraríamos una cura, lo cual es bueno, ya que tener diabetes es duro.
Mis amigos Frankie y Angus tienen otro ayudante para su diabetes. Tienen perros de alerta diabética (DAD, por sus siglas en inglés). El perro de Frankie se llama Mochi por el desierto japonés y el perro de Angus se llama Bruce por Bruce Wayne, quien realmente es Batman. Yo también quiero un DAD.
Los perros tienen muy buen sentido del olfato. Huelen cosas que las personas no pueden oler. A los perros de alerta para personas con diabetes se les entrena para oler cuando tu azúcar en la sangre es demasiado baja o demasiado alta. Si estás durmiendo, el perro salta y se te sube; y, si estás despierto, te da un golpecito en tu muslo o rodilla. Si no te despiertas, va a avisar a mamá o a papá, diciéndoles guau guau guau, ¡VAYAN A AYUDAR A HENRY!
Me gusta salir a explorar. Quiero llevar a Tako Taco conmigo a explorar en el bosque, así que si mi nivel baja, él puede avisarme y yo mismo me puedo tratar como un chico grande.
¡Los perros de alerta diabética cuestan mucho dinero! Tienen que ser entrenados por un profesor especial. Tenemos uno muy bueno en Texas que está buscando un perro para nosotros. Quiero que encuentre un perro en un refugio para que podamos salvarle la vida. Quiero que se llame Tako Taco por mis dos comidas favoritas. Tako es la palabra japonesa para pulpo. ¡Ya sabes lo que es un taco! Si no sabes lo que es un taco, ¡estás loco!
Soy solamente un niño, así que no tengo un trabajo para ganar dinero. Hablé con mi mamá y mi papá para saber qué podría hacer yo y dijeron que yo era muy bueno para dibujar (y mi hermana también), así que tal vez podríamos hacer dibujos para las personas. Mi papá es un caricaturista y a él le pagan para dibujar, lo cual es genial.
Así que empezamos a hacer dibujos de las personas y los enviamos a algunos amigos. Mi mamá hizo una página Gofundme y a las personas realmente les gustaron los dibujos y pidieron más. Recaudamos suficiente dinero en 14 días, lo que quiere decir que ¡Tako Taco será parte de nuestra familia! Mantente atento para más aventuras emocionantes, compartiré todo sobre cómo es realmente tener un DAD.
P.S. Puedes revisar la página de mi mamá en Instagram para ver lo que pasará próximamente.
P.S.S. Además, mi amigo Sam bailó para recaudar dinero para traer a Tako Taco, lo cual fue divertido.
Nota del editor: Henry recogió a su perro Tako Taco en julio, en Texas. ¡Mantente atento para más detalles sobre cómo van las cosas!
