LA CONVERSACIÓN SOBRE LOS CUIDADOS


 2017-11-15

Cuando tu hijo es diagnosticado con diabetes tipo 1, tu mundo se sacude. Aprendes todo lo que hay sobre una vida con diabetes tipo 1 y aprendes cómo cuidar a tu hijo en cada situación previsible. En algún punto estableces una rutina y el conocimiento empírico crece lo suficiente como para construir una buena base de confianza. Básicamente, la vida vuelve a su ritmo normal, hasta que agregamos gente nueva y lugares a esta rutina y de repente, hay nuevas cosas a tomar en consideración. Las ocasiones como una salida de noche sin niños, enviarlos a casa de la abuela y el abuelo por el fin de semana, irlos a dejar diariamente al colegio, en la casa o la casa de un amigo, o inscribirse en actividades extracurriculares pueden de pronto producirte ansiedad.

 

¿Entonces, qué podemos hacer? Hay dos partes en esta ecuación

 

  1. Tú, como padre, debes sentirte seguro de permitirle a tu hijo que experimente estas actividades importantes en la vida, incluso cuando no puedes estar presente.
  2. El encargado (maestros, padres, enfermeras de la escuela, niñeras, amigos, vecinos, etc.) necesita sentirse seguro de su conocimiento de la diabetes tipo 1, destrezas y habilidades para aprobar que cuide de tu hijo.

 

¿Cómo hacemos para hacernos sentir cómodos mutuamente? Esto empieza con la conversación sobre los cuidados. Este es un diálogo continuo entre el padre o el encargado y el nuevo posible cuidador. La conversación puede variar de tema dependiendo del contexto (la escuela, el campamento, una situación en la que se tenga que pasar la noche, etc.) y la conversación puede ser desalentadora, pero continuarla ayudará a dejar en claro todo y situar a cada una de las partes a gusto.

 

Aborda la conversación sobre los cuidados, con una bosquejo general de lo que quieres cubrir. La conversación variará  dependiendo de la persona con la que hablas, cuál es su rol en la vida de tu hijo y si ya te has relacionado con ella antes. Piensa en la línea delgada entre un extensa descripción general de la diabetes tipo 1 y lo que el cuidador necesita saber sobre la diabetes tipo 1 para esa situación en particular. Entonces empieza con lo segundo.

 

¿Aún no estás seguro por dónde empezar?   Piensa en proporcionarle al cuidador un resumen basado en hechos de la diabetes tipo 1 y cómo se diferencia de la diabetes tipo 2. Mucha gente está más familiarizada con la publicidad que ve en las revistas y en la televisión, la cual generalmente se refiere a las necesidades de la comunidad de personas con diabetes tipo 2. Cuando estés listo para enseñar algo más que esa introducción básica, dirige la conversación formulando preguntas de respuesta abiertas . La única manera de cerciorarse de lo que el encargado ya sabe o aún necesita saber sobre la enfermedad, el control y las tareas relacionadas al día a día, es preguntando. Por ejemplo, la primera buena  pregunta es simple, puede ser algo como: “¿Qué sabes sobre la diabetes tipo 1?” o “¿Has  cuidado niños con diabetes tipo 1 antes, y cuál era tu rol en su cuidado?”

Esto te da la oportunidad de corregir cualquier concepto erróneo o información vieja que el posible cuidador pueda tener sobre la diabetes tipo 1. Esto también proporciona la forma de presentar la forma de control y la rutina que se adapta mejor a tu niño. Sé abierto a preguntas en respuestas a las tuyas. Ten en cuenta que eso puede ser información fresca y abrumadora. En general, no todos tienen la experiencia de controlar la diabetes tipo 1 en seres queridos todos los días.

 

Pero hay formas de hacer la interacción menos cansada

 

  1. Cuando sea pertinente, considera distribuir la conversación en más de una llamada, correo electrónico o visita.
  2. Sé consciente de la actitud que tomas cuando tengas la conversación. Nuestro instinto podría hacer sentirnos ansiosos o a la defensiva, pero cuando estamos estables y positivos sobre la oportunidad de compartir nuestro mundo con alguien, que probablemente tendrá un rol importante en la vida de alguien que amamos, todos los que están relacionados sienten esa energía.
  3. Prepárate para la conversación con suplementos sobre los cuidados, con herramientas y recursos para una fácil consulta, incluyendo La confianza de sí mismo del cuidador  para la diabetes tipo 1.

 

Cuando escribí La confianza en sí mismo del cuidador de la diabetes tipo 1, tenía a familias como la tuya en mente. El libro está dividido en tres partes principales que enmarcan la conversación sobre los cuidados: ¿Qué es la diabetes?, La diabetes día a día y la confianza en sí mismo del cuidador.

 

La mejor conversación sobre los cuidados se desarrolla como una diálogo que viene y va entre padres y encargado, apoyados de una combinación de información que es específica para la estrategia en el control de la diabetes, la rutina de cuidado para tu niño con diabetes tipo 1 y el rol del encargado. Cuando sabes que tu hijo está en manos buenas y capacitadas,, no hay límite para las actividades y oportunidades que él o ella puede experimentar.

 

Lee: Lista de verificación de las niñeras de Sara Jensen, mamá de un niño  con diabetes tipo 1.

 

ESCRITO POR SAMANTHA MARKOVITZ, PUBLICADO 11/15/17, UPDATED 11/15/17

Samantha Markovitz es una entrenadora de salud certificada por la Mayo Clinic, fundadora de GraceMark Wellness & Lifestyle Coaching, autora de El Cuidador de confianza para la diabetes tipo 1 y el blog GraceMark Musings. Fue diagnosticada con diabetes tipo 1 siendo adulta en el 2014, ella vivió la necesidad de informarse por su cuenta y ser su propia defensora. Samantha cree que viene de un lugar de fuerza y esperanza, sin miedo ni restricción tanto para ella como para sus clientes. Ella presta su lema personal de su alma máter, la Universidad de Arizona: “¡Aguanta!” Explora el concepto del entrenamiento de salud para la diabetes tipo 1 y el blog GraceMark Musing en www.gracemark.org.