Lección aprendida: la experiencia inusual de Michelle con cetoacidosis


 2019-06-19

Una historia con final feliz

Mi nombre es Michelle Lord y he vivido con diabetes tipo 1 durante más de 16 años. Me diagnosticaron a los 12 años, con un nivel de glucosa (azúcar) en sangre de solo 180 mg/dL10 mmol/L. No hace falta decir que me diagnosticaron en una etapa temprana de la progresión de mi diabetes tipo 1 y no experimenté cetoacidosis diabética (CAD). Después de mi diagnóstico, logré vivir con diabetes tipo 1 durante 15 años y evité completamente la CAD. En ese momento de mi vida tenía la impresión de que nunca pasaría por eso ya que todo estaba bien controlado, y me enseñaron que la CAD solo puede ocurrir cuando el nivel de glucosa en sangre es extremadamente alto durante un período prolongado de tiempo.

Se comprobó que esa teoría era incorrecta en enero de 2018 cuando me dio CAD por primera vez con niveles de glucosa en sangre que no eran “extremadamente altos”. Es importante para mí compartir lo que sucedió, ya que no es una historia típica de CAD. Mi experiencia me enseñó que la CAD puede pasarle a cualquier persona con diabetes tipo 1 en cualquier momento.

Un caso inusual

La noche del 11 de enero de 2018 me fui a dormir con un nivel estable de glucosa en sangre de 113,4 mg/dL6,3 mmol/L. Me desperté unas horas más tarde y noté que había subido a 180 mg/dL10,0 mmol/L, pero aún estaba estable. No me pareció extraño, me di una rápida corrección con mi bomba de insulina y me volví a dormir. Me desperté 2 horas más tarde sintiéndome un poco rara, me sentía con náuseas y con mucho calor. Revisé mi nivel de azúcar en la sangre y vi que había subido hasta 234 mg/dL13,0 mmol/L, pero estaba estable. Esto fue un poco preocupante ya que mi corrección anterior claramente no había sido demasiado efectiva. Todavía así no se me ocurrió verificar la presencia de cetonas ya que mi nivel de glucosa en sangre no era extremadamente alto, así que hice otra corrección con mi bomba de insulina y me volví a dormir.

Me desperté poco después sintiendo mucha náuseas y terminé vomitando. En este punto, mi nivel de glucosa en sangre aún era estable en 234 mg/dL13,0 mmol/L, que se confirmó con mi glucómetro. Tenía muchas náuseas, sudaba, tenía la visión borrosa y reconocí rápidamente los síntomas de tener cetonas. Me dije: “¡No hay manera de que pueda tener cetonas con un nivel de glucosa en sangre de 234 mg/dL13,0 mmol/L! Debo tener gripe o algo así”. En ese momento solo tenía tiras de orina para medir cetonas, las que cambian de color según la concentración de cetonas en la orina. Saqué una tira para examinar mi orina, y para mi sorpresa, ¡la tira dio el color más oscuro! Esta era la concentración más alta de cetonas que la tira era capaz de medir. Recuerdo que estaba muy confundida en cuanto a cómo era posible que tuviera tantas cetonas con mi nivel actual de glucosa en sangre. Independientemente de mi nivel de glucosa en sangre, estaba claro que estaba muy enferma y que necesitaba ir al hospital lo antes posible.

Reconocer los síntomas

Mi esposo me llevó sin demoras a la sala de emergencias donde me pusieron inmediatamente líquidos intravenosos y me hicieron muchos análisis de sangre. Además de sentirme extremadamente mal, tuve un estallido de vena cuando insertaron un catéter intravenoso, lo que me hizo desmayarme (sí, soy de las que se desmayan). Esta fue una de las visitas al hospital más dramáticas que he tenido. Las pruebas revelaron que tenía “CAD leve”, o CAD diagnosticado en las primeras etapas. Me administraron líquidos por vía intravenosa durante 7 horas, lo que me ayudó a reducir mis cetonas a un nivel seguro para volver a casa. Una vez que llegué a casa, lo primero que hice fue cambiar el sitio de infusión de la bomba de insulina, ya que ese era el sospechoso culpable de mi CAD. Efectivamente, cuando quité el sitio, ¡la sangre brotó! Sospecho que mi sitio estaba atascado en algo, lo que me impedía recibir la cantidad total de insulina administrada desde mi bomba. ¿Por qué mi glucosa en sangre estaba solo en 234 mg/dL13,0 mmol/L? ¡Nunca lo sabré! Sin embargo, el médico en la sala de emergencias me dijo que no necesariamente tenía que tener un nivel alto de glucosa en sangre para que me diera CAD, y que existen muchas otras razones, como las infecciones.

Toda esta experiencia fue una llamada de atención para mí. Vi de primera mano que la CAD puede desarrollarse en cuestión de horas, y ¡lo peligrosa que puede ser! Es muy importante saber cuáles son las señales de advertencia para que puedas medirte las cetonas y buscar ayuda si es necesario. El día después de estar en el hospital, salí y compré tiras reactivas para medir cetonas en sangre en la farmacia para poder tener valores de medición más precisos, y también filmé un video sobre mi experiencia para mis suscriptores de YouTube. Sentí que era mi deber hacer correr la voz e informar a otras personas que viven con diabetes tipo 1 que la CAD no siempre ocurre con un nivel alto de glucosa en sangre. Si mi historia puede ayudar al menos a una persona con diabetes, ¡entonces vale la pena compartirla!


Este artículo forma parte de los recursos de Beyond Type 1 sobre el manejo de cetonas: encuentra la colección completa de recursos aquí.

ESCRITO POR Michelle Lord, PUBLICADO 06/19/19, UPDATED 01/09/23

Michelle tiene 29 años y vive en Toronto, Canadá, donde acaba de completar su doctorado en física médica. Ella ha estado viviendo con diabetes tipo 1 desde que tenía 12 años y actualmente utiliza la bomba de insulina t: slim X2 y el monitor de glucosa continuo Dexcom. Michelle está muy involucrada en la comunidad en línea de la diabetes y regularmente publica videos en su canal de YouTube sobre el estilo de vida de la diabetes tipo 1. En su tiempo libre, a Michelle le encanta tomar clases de ballet, viajar a lugares nuevos y pasar tiempo con la familia, los amigos y su esposo Raffi.