¿Tendrás un invitado con diabetes tipo 1 estas fiestas?


 2017-12-18

¿Te has encontrado diciendo: “Voy a organizar una fiesta y mi compañero, mi cuñado, mi prima, mi sobrina, mi sobrino, mi abuelo, mi hijo mayor, mi tía, un amigo va a venir y tiene diabetes tipo 1? ¿Qué puedo hacer para ser un excelente anfitrión?

Todos sabemos que tienes buenas intenciones cuando haces preguntas, das consejos o muestras interés sobre el tema, pero ningún invitado quiere ser el aguafiestas, el problemático o el tema principal de la conversación solo porque vive con diabetes tipo 1. Hay formas de ayudar a tus invitados a sentirse bien y cuidarse al mismo tiempo.

Estos son algunos consejos útiles 

1. No esperes que todo salga perfecto

Ningún día es un “día libre”. La diabetes tipo 1 es un trabajo de tiempo completo y un día festivo es como cualquier otro día cuando se vive con una condición de salud tan compleja.  No hay manera de hacer que un día sea fantástico solo porque es un día festivo nacional.

2. Sé flexible

Prácticamente todo tiene impacto en los niveles de glucosa en sangre de una persona con diabetes tipo 1. Desde comer hasta hacer ejercicio, y los planes poco flexibles pueden hacer que las cosas se dificulten un poco más. Los niveles de glucosa en sangre fluctúan, y los planes de tu invitado podrían tener que cambiar.

3. Aboga por el autocuidado

Deja que tu invitado se cuide a sí mismo como lo necesite. Si tu invitado necesita ir a dar un paseo rápido o sentarse y tomar un poco de jugo, deja que lo haga. Tus sentimientos personales al respecto, no importan. La forma en que esperabas que transcurriera el día, o tu deseo de participar en una actividad diferente a un ritmo diferente es menos importante que la salud de tu invitado. Dale la libertad de tomar las mejores decisiones para él o ella.  Puedes preguntarle si puedes unírtele en esa actividad, pero no le sugieras que lo haga de manera diferente. La persona sabe bien lo que es mejor para ella.

4. Evita los consejos no solicitados

Decir “Eso tiene demasiada azúcar” o “¿Puedes comer eso?” en realidad puede percibirse como ofensivo. Tu invitado sabe cuándo y qué puede y debe comer mucho mejor que tú, y cuestionarlo implica que no lo sabe hacer.

5. Evita las sugerencias sobre alimentación

Ofrecerle comida específica a tu invitado o cuestionar sus opciones de comida puede crear una tensión incómoda. Si vas a servir un platillo o un postre, deja que cada uno se sirva su propio plato y no cuestiones por qué tu invitado eligió algo o no comió algo. Abstenerte de hacer preguntas o de ofrecer, le permite a tu invitado tomar decisiones sin prejuicios sobre su cuerpo y su salud.

6. Evita hablar constantemente de su nivel de glucosa (azúcar) en sangre

A menos que tu invitado lo comparta, sus niveles de glucosa en sangre no son asunto tuyo. Incluso si se trata de un familiar cercano.

7. Evita el lenguaje crítico

Si tu invitado saca a relucir sus niveles de glucosa en sangre, evita referirte a la cifra como “buena” o “mala”. Los niveles de glucosa (azúcar) en la sangre no son malos o buenos, y etiquetarlo de esa manera puede hacer que tu invitado sienta que está haciendo un mal trabajo cuidándose a sí mismo. Los niveles de glucosa en sangre son bajos y altos.

8. Olvida las opciones “sin azúcar”

Muchas veces, traer a la mesa alimentos sin azúcar tiene una buena intención. Sin embargo, estos alimentos tienden a tener la misma cantidad de carbohidratos y tienen un sabor menos impresionante. Hay una gran cantidad de alimentos bajos en carbohidratos que todos pueden disfrutar que no incomodarán a tu invitado con la etiqueta “sin azúcar”. Las verduras verdes, las verduras crucíferas, las carnes y los quesos son alimentos buenos y bajos en carbohidratos para servirlos en cualquier fiesta. Son saludables para todos, y le permitirán a tus invitados disfrutar de cosas deliciosas sin importar su nivel de glucosa en sangre.

¿Lo principal que se puede aprender de esto? Trata a tu invitado como a cualquier otro invitado, con compasión y sin expectativas. No hables de diabetes tipo 1 a menos que te la mencione, y deja que esa persona tome las riendas si necesita alejarse para cuidarse a sí misma. ¡Harás que la reunión sea mucho más fácil para todos!

ESCRITO POR Rosemary Stewart, PUBLICADO 12/18/17, UPDATED 11/28/23

Rosemary Stewart es una actriz y cantante nacida y criada en Nashville, Tennessee. Pasa la mayor parte de sus días actuando, pasando su tiempo con bebés o ayudando a músicos. Está casada con Brett Ryan Stewart, músico y propietario de The Sound Shelter, que tiene diabetes Tipo 1. Con una pasión por el activismo, disfruta trabajar para asegurarse de que la diabetes Tipo 1 sea comprendida en los alrededores y los retos que esta conlleva.