El cuidado de nuestras uñas y lo que nos dicen de nuestra salud


 2022-09-08

Las uñas sirven para algo más que para rascarse de vez en cuando o deshacer un nudo apretado. Además de tener una función biológica que es proteger los dedos de los agentes externos así como tener una mayor precisión a la hora de llevar a cabo labores manuales, también pueden ofrecer pistas sobre nuestro estado de salud general y si nuestra alimentación es correcta y adecuada mediante su color, forma y textura.

Unas uñas sanas y fuertes, de un color rosado uniforme y con una pequeña media luna más clara en la base llamada lúnula hablan de una buena salud general y de unos buenos niveles de nutrición e hidratación

Aunque muchas veces los problemas de las uñas se relacionan con las agresiones del medio ambiente, el uso de productos químicos de limpieza fuertes o al abuso físico cuando las usamos como si fueran herramientas, los cambios de color o irregularidades en su forma y su textura, pueden ofrecer información importante sobre nuestro estado nutricional y nuestra salud.

No todos los cambios en las uñas son malos. Algunos son completamente inofensivos, y otros son parte normal del envejecimiento o pueden ser un efecto secundario de algún medicamento. Pero si notas algún cambio y te preocupas, vale la pena que se lo comuniques a tu proveedor de atención médica, especialmente si también experimentas otros síntomas como fatiga, dificultad para respirar o dolor de vientre.

Esto es lo que deberías comprobar la próxima vez que te mires las uñas.

Cambios en la lúnula

La mayoría de las uñas tienen una forma de media luna blanca en la base, justo por encima de la cutícula, llamada lúnula. Es más grande en la uña del pulgar y disminuye de tamaño a medida que avanzas hacia el meñique. Los cambios en tamaño o color de la lúnula pueden ser señal de distintas enfermedades y debería consultarse al médico.

Cambios en la forma y textura de las uñas

Uñas picadas o con pocitos

Los pocitos son irregularidades que alteran la textura suave y uniforme de la uña y que le crean unas marcas características. Si esto te ocurre, es posible que tus uñas estén sufriendo de una enfermedad inflamatoria de la piel que afecta a las uñas y provoca la aparición de algunas marcas. Es importante iniciar su tratamiento a tiempo para evitar su avance.

Uñas con forma de cuchara

Las uñas normales son levemente elevadas en el medio y caen en curva a los lados. Si notas que están en forma opuesta, es decir, curvadas en el medio o en forma de cuchara especialmente en los pulgares, puede ser un signo de un problema relacionado con mucho o poco hierro.

Uñas en palillo de tambor

Especialmente en las personas mayores a veces los dedos adoptan una forma parecida a los palillos de un tambor, más gruesos por la punta. Esto agranda la uña y hace que se curve en exceso. Esto puede indicar problemas cardiovasculares, pulmonares o gastrointestinales y debe acudirse al médico para estar seguros.

Uñas despegadas de la piel

Lo más frecuente es que el desprendimiento se produzca por un golpe, porque el dedo quedó atrapado en una puerta, o incluso por ejercer presión repetidamente en el extremo de la uña. También puede originarse en el contacto de los dedos con sustancias irritantes, como detergentes, cosméticos muy agresivos o alimentos crudos o ácidos, como los cítricos. Y si está lesionada la uña es más propensa a infectarse por hongos o bacterias que cambiarán su color. Pero también es posible que la tiroides no esté funcionando bien por lo que debe consultarse al médico. 

Líneas en las uñas

Estrías y rugosidades

Si las estrías son regulares y poco pronunciadas, es probable que se deban a un golpe. Además, las estrías longitudinales por lo general aparecen con la edad y no suelen representar ninguna enfermedad. 

Si las estrías son transversales pueden indicar falta de vitaminas, una reacción adversa a algún medicamento, o si has tenido una enfermedad grave puede que indique el momento en el que la uña dejó de crecer temporalmente. 

En ocasiones puntuales, las estrías pueden relacionarse con otro tipo de enfermedades, y ante la duda, siempre es mejor acudir al médico quien indicará el tratamiento oportuno si detecta alguna carencia nutricional o enfermedad.

Surcos transversales o líneas de Beau

Si tus uñas tienen una línea horizontal parecida a una hendidura, podría ser una señal de que has padecido una enfermedad grave o de que has sufrido una lesión que ha hecho que las uñas dejen de crecer temporalmente. Cuando el organismo vuelve a la normalidad, las uñas se regeneran y las líneas de Beau desaparecen.

Estas líneas, denominadas líneas de Beau, también pueden ser una señal de diabetes no controlada.

Cambios de color

Uñas amarillentas

La aparición de un tono amarillento es una de las anomalías más comunes en la superficie de las uñas. Puede ser por causas muy variadas que incluyen desde el uso de ciertos esmaltes de uñas y el tabaquismo hasta la presencia de hongos o problemas nutricionales, como un déficit de algunas vitaminas o un consumo elevado de otras o de alimentos con betacaroteno (naranjas, calabazas y zanahorias, entre otros).

El color amarillento de las uñas también podría estar indicando una afección pulmonar y lo mejor es consultar con un médico.

Manchas blancas

Existe la creencia de que las manchas blancas indican una falta de calcio en el organismo, pero en general no es así. La mayoría de las veces, la presencia de estas manchas en las uñas es el resultado  de un golpe que no hayas notado y no tiene otras consecuencias. Sin embargo, si hay muchas manchas en distintas uñas, tal vez sea señal de falta de algunos nutrientes.

Si estas manchas están en la piel debajo de la uña, y no en la uña, podrían ser una señal de diversos trastornos que deben consultarse con el médico. Para saber dónde están las manchas, presiona sobre la uña y si las manchas o la palidez de la uña desaparecen, esto quiere decir que la mancha está debajo de la uña.

Uñas verdosas o azuladas

En general, cuando las uñas adquieren una tonalidad verdosa están delatando la presencia de hongos o alguna infección bacteriana. 

El aspecto azulado, morado o púrpura puede ser un hematoma producido por un golpe. Pero si no te has dado un golpe, puede ser una señal de problemas de oxigenación y debes consultar con tu médico.

Uñas finas, frágiles y quebradizas 

Las uñas frágiles y quebradizas pueden tener distintas causas, pero la más frecuente es que necesitan más hidratación y nutrición, tanto a nivel externo como interno. Al igual que la piel, las uñas pueden absorber la humedad, por lo que se recomienda frotarlas con vaselina o usar crema de manos cuando se sientan secas. Otra forma de mantenerlas en plena forma es seguir una dieta equilibrada.

También es común que las uñas se debiliten por el contacto con sustancias abrasivas, como los productos de limpieza por lo que usar guantes para lavar los platos o limpiar con productos químicos también puede evitar que las uñas se vuelvan frágiles. 

Otros motivos posibles de que las uñas se tornen quebradizas son las situaciones de mucho estrés, infecciones por hongos y algunas enfermedades por lo que es importante que las vea un dermatólogo para estar seguros

Y no debemos olvidar que las uñas también se vuelven más frágiles como consecuencia del envejecimiento.

Consejos para tener unas uñas sanas

  • Mantenerlas limpias. La higiene de las uñas es fundamental para reducir la probabilidad de problemas, sobre todo si se tiene en cuenta la gran cantidad de bacterias y otros microorganismos que se alojan en la parte de contacto entre la uña y la piel, incluso aunque nos lavemos las manos con frecuencia.
  • Limitar el contacto con el agua. La humedad crea un ambiente más propicio para la proliferación de microbios. Además, el contacto frecuente con el agua ablanda y debilita las uñas, por lo cual conviene que estén secas la mayor cantidad de tiempo posible.
  • Alimentarse e hidratarse bien. Muchos de los problemas en las uñas se derivan de insuficiencias nutricionales y una dieta equilibrada y saludable ayuda a mantenerlas sanas. Además de beber mucha agua, las mismas cremas que se utilizan para las manos permiten conservar las uñas hidratadas.
  • Cortarlas rectas y no morderlas. Al cortar las uñas, se debe procurar seguir una curva suave sin irregularidades, pues estas también favorecen la presencia de bacterias. 
  • Evitar los cosméticos de mala calidad. Muchos de estos productos contienen sustancias abrasivas que las debilitan y favorecen la acción de bacterias y hongos.
  • Estar atentos a sus señales. Los cambios de color, forma y textura son “mensajes” con los cuales las uñas alertan de que algo puede estar sucediendo. Poner atención a esos mensajes es una clave para actuar contra los problemas lo antes posible y proteger de ese modo la salud de las uñas y de todo el organismo.