Por qué los Niños con Diabetes Tipo 1 Deben Hacer Deportes


 2016-08-19

 

 

 

 

“¿Qué quieres ser cuando seas grande?”

En algún momento en la escuela primaria a todos los niños se les hace esta pregunta. El maestro probablemente consiga una respuesta que viene directamente del corazón.

Mi respuesta para la señora Smith en el tercer grado fue:  “Un jugador profesional de fútbol americano”.

La respuesta de la señora Smith fue: “Puedes hacer lo que quieras, siempre y cuando estés dispuesto a trabajar por ello”.

Con los años, he trabajado duro en el fútbol. Yo era un estudiante de primer año con un puesto de titular como tackle ofensivo de mi equipo de fútbol de preparatoria cuando me dieron el golpe con un diagnóstico de diabetes tipo 1. Me preguntaba si había llegado al final de mi sueño. La esperanza regresó cuando mi médico me dijo que podía seguir jugando al fútbol si y sólo si lo hacía todo bien.

Para hacer deportes, los chicos con diabetes necesitan empoderamiento como el que me dieron la señora Smith y mi médico.

Necesitan que se les den esperanzas de que pueden hacer deporte si lo hacen todo bien. Forzar a un chico a sentarse en su habitación y a ver su azúcar en la sangre durante todo el día sólo hará que se sienta resentido y luego podría perder el deseo de trabajar para mantener la salud con la diabetes.

Si bien a los chicos no se les debe reprimir para hacer deportes debido a que viven con diabetes, tampoco se les debe arrojar a hacer cualquier actividad física extrema sin un plan.

Screen-Shot-2015-08-30-at-10.02.04-PMMientras jugaba fútbol americano en la Universidad de Wisconsin, se me acercaron dos chicos jóvenes con diabetes tipo 1 que querían jugar al fútbol. Aunque sus padres tenían una gran cantidad de reservas, permitieron que sus hijos buscaran las posibilidades de jugar al fútbol.

Joey y Hunter me buscaron, me hicieron preguntas de cómo proteger su bomba de insulina durante los partidos y de cómo eso afectaba los niveles de azúcar en la sangre al jugar. Después de hacer su investigación, sus padres les ayudaron a elaborar un plan.

Tener un plan es esencial. Las estrellas de elite en los deporte y también en control de la diabetes, son los chicos que tienen una estrategia para lograr sus objetivos en el campo y en todas las áreas de su vida; como pasar la noche en casa de un amigo, buscar un trabajo, o cualquier cosa que un chico normal haga.

Los padres que ayudan a sus hijos con un plan para controlar su azúcar, fijando metas diarias y semanales, tienen un gran impacto en la vida de su hijo con diabetes. En lugar de empujarlo a que se aleje, el chico sentirá que sus padres están en su equipo.

Un plan inteligente para las personas con diabetes incluye el control diario de la dieta que incluye comer alimentos adecuados y saber cómo reaccionará el cuerpo a ciertos alimentos. Los padres también necesitan entender cómo va a reaccionar el cuerpo del chico durante y después de un entrenamiento.

Mi plan incluye saber cuándo comer mi primera comida, la hora del día en que voy a forzar físicamente mi cuerpo (la práctica de la mañana). Tenía que estabilizar el azúcar en mi sangre para iniciar la práctica.

Yo tenía que tener mi medidor conmigo o asegurarme de que mi entrenador lo tenía. Llevaba glucosa e insulina conmigo en todo momento.

Asegurarme de estar estable después de la práctica también era necesario. Necesito una comida o una merienda después de cualquier actividad extrema para compensar el colapso que se produce después de esfuerzo físico de alta intensidad. Al final del día los niveles de azúcar en la sangre son igual de importantes, si no lo más importante. Antes de ir a la cama, quiero asegurarme de estar estable y que lo haya estado durante tanto tiempo como sea posible.

La razón por la que escribí mi libro ““First and Goal – What Football Taught Me About Never Giving Up [Primera y gol – lo que el fútbol me enseñó sobre nunca darme por vencido] fue para hablar con los niños siendo un atleta con diabetes, un miembro de su equipo. Quiero que los niños sepan que mi diabetes no es diferente que la de ellos. Quiero decirles que he trabajado duro, que encontré una manera de hacer lo que tenía que hacer, y que ellos también pueden hacerlo.

Yo era un chico con grandes sueños, empoderado por una maestra positiva que me dijo que podía hacer lo que quisiera si trabajaba por ello.La diabetes no me ha impedido alcanzar mis metas de jugar en la NFL. Mi esperanza es ayudar a que las personas con diabetes vivan sus sueños, que alcancen sus objetivos en todos los aspectos de la vida, y  que nunca se den por vencidas.

ESCRITO POR Jake Byrne, PUBLICADO 08/19/16, UPDATED 08/28/19

Jake Byrne creció en Rogers, Arkansas. Vive con diabetes tipo 1 desde la edad de 14 años, y desde entonces ha sido proactivo en la lucha contra la enfermedad y en ser mentor de jóvenes con diabetes. Jugó al fútbol en la Universidad de Wisconsin de tight end (extremo cerrado), y pasó a competir en la NFL. Originalmente fue un agente libre que firmó con los Saints de Nueva Orleans en el 2012, también jugó con los Houston Texans, con los Kansas City Chiefs, y con los Chargers de San Diego. Actualmente, Jake y su esposa Emma viven en Dallas y tienen dos perros: Yeti el gran danés y Duke el Dogo Argentino. Sigue el blog de ​​Jake en www.typewon.net o encuéntralo en Instagram o Twitter @ Jakebyrne81 @ sugarfreejb8