Embarazada y con diabetes tipo 1 durante una pandemia


 2021-01-20

Nota del editor: Aunque con frecuencia se les malinterpreta profundamente, las personas que viven con diabetes Tipo 1 pueden tener embarazos y bebés sanos. Si bien se requiere atención especial a los niveles saludables de azúcar en la sangre y el apoyo cercano de profesionales de la salud alineados, un embarazo saludable es completamente posible. Puedes ver más información y leer historias de otras personas que han estado embarazadas mientras vivían con diabetes tipo 1 aquí. Ten en cuenta que la edad a la que puedes tener un embarazo saludable también depende en gran medida de tu salud individual; trabaja con un proveedor de atención médica de confianza para determinar qué es lo mejor para ti.


Comencé a notar el peso de mi diabetes y mi mortalidad cuando tenía veinticinco años y fui a ver a un nuevo ginecólogo. Mientras recopilaba mi historial médico, me preguntó si pensaba tener hijos. Respondí “Sí, con el tiempo. Cuando esté un poco más acostumbrada”.

Él respondió: “Bueno, debes asegurarte de tener a tu hijo a más tardar a los treinta años, de lo contrario será casi imposible tener un embarazo saludable. De por sí ya será complicado…”

Acababa de empezar un nuevo trabajo y todavía vivía en casa de mis padres. Mi vida apenas comenzaba y era poco estable, pero tenía que comenzar a planificar para tener un hijo en un futuro muy cercano o arriesgarme a perder la oportunidad de hacerlo.

El embarazo y la maternidad se convirtieron en algo que parecía menos una bendición y más una maldición. No ayudó que la única representación del embarazo con diabetes tipo 1 a la que pudiera referirme fuera Julia Roberts en Magnolias de Acero. Alerta de spoiler… ella muere.

El miedo al embarazo y mi fecha límite me persiguió durante los siguientes seis años. Ese miedo y ansiedad alcanzaron su punto máximo en el otoño de 2017 cuando me di cuenta de que necesitaba hacer cambios generales en mi vida.

Si bien no estaba lista para tener un bebé en ese momento, sabía que quería estar sana y en forma física para el embarazo cuando llegara el momento. Para superar mis batallas con la diabetes y la salud en general, busqué terapia para ayudarme a manejar mi diabulimia, mi depresión y mi ansiedad. No pasó nada de la noche a la mañana, pero en el transcurso de los dos años siguientes, mis éxitos superaron lentamente en número a mis reveses.

Cuando haces un plan, Dios se rie

Para enero de 2020, había tenido mi tercera cita con mi nuevo endocrinólogo; después de dieciocho meses de no saber mi HbA1c, ¡descubrí que era 7! Fue el más bajo en más de una década, y todavía no me había esforzado al máximo.

Me volví a sentir inspirada por mi último análisis de sangre y me di cuenta del increíble potencial para manejar mis azúcares y mantener mi cuerpo saludable para todos los planes de vida futuros. Al ritmo que iba, para cuando tuviera mi boda en el verano de 2021, mi cuerpo estaría listo para un bebé poco después.

¡Para mi sorpresa, unas semanas después de esa cita me enteré de que estaba embarazada! No fue planeado y fue inesperado. Obviamente estaba emocionada, pero era un arma de doble filo: ¿Sobreviviría el bebé a un embarazo con diabetes? ¿Sobreviviría yo a un embarazo? A pesar de recibir buenos análisis de sangre, mi dieta era mala y, en el mejor de los casos, medía mis niveles de azúcar en la sangre de manera inconsistente.

Es traumatizante vivir con diabetes tipo 1 y descubrir que estás embarazada inesperadamente, porque tienes que superar años de duda internalizada y enojo hacia tu diabetes

Si nuestros cuerpos apenas pueden manejar el azúcar, ¿pueden realmente manejar la creación y el parto de un bebé? Porque, como dije… no le fue tan bien a Julia en Magnolias de Acero.

Además, los médicos pueden ser desalentadores y condescendientes si tu diabetes no está bien manejada. Después de quedar embarazada, conocí a muchas mujeres con diabetes tipo 1 a quienes los médicos menospreciaron o les infundieron miedo afirmando que su bebé moriría si la madre cometía el más mínimo error en su manejo.

Un momento que con frecuencia es emocionante para la mayoría de las mujeres, es uno de inmenso temor para las mujeres con diabetes.

Solo le conté a mis familiares y mis amigos cercanos sobre el embarazo porque mi mayor temor era permitirme sentirme feliz y anunciarlo al mundo (bueno, anunciarlo en las redes sociales) solo para perder el bebé debido a mi diabetes.

Incluso si no se debiera a la diabetes, temía que la gente asumiera que mi diabetes lo hubiera causado. Los primeros tres meses de embarazo te preocupa que puedas sufrir un aborto espontáneo, y luego, durante el resto del embarazo, te ejerces demasiada presión sobre ti misma por temor a que cualquier percance de la diabetes pueda dañar al bebé.

Sin embargo, a pesar de los miedos y la ansiedad, mantuve una actitud positiva, practiqué lo que aprendí en la terapia, comí de manera saludable y me ejercité casi a diario. Me uní a una comunidad en línea de mujeres con diabetes tipo 1 que estaban experimentando un embarazo. Esta comunidad fue mi recurso más útil.

La comunidad y un sistema de apoyo son vitales durante cualquier embarazo, no se diga en un embarazo con diabetes tipo 1, y mucho menos un embarazo con diabetes tipo 1 en medio de una pandemia. Pude ver que no estaba sola en esta experiencia e interactuar con otras mujeres que tenían miedos y ansiedades similares y con las que podía sentirme identificada. En estas comunidades, también puedes buscar el consejo de otras mujeres que ya experimentaron un embarazo. ¡Te sorprendería saber cuántos comportamientos con respecto a la diabetes que creías que eran extraños o únicos en ti en realidad son bastante comunes!

Dando la bienvenida a Noa

A principios del otoño de 2020 di a luz a mi hermosa bebé de azúcar, Noa (No-ah) a la madura edad de treinta y un años. Mi inducción, trabajo de parto y parto duraron un total de 28 horas y ella nació con una salud prácticamente perfecta. Tuvo algunos problemas de azúcar en la sangre el primer día, pero se estabilizó el segundo día y ambos pudimos irnos a casa el tercer día.

Nueve meses de embarazo con diabetes tipo 1 me enseñaron mucho sobre cómo vivir con esta enfermedad. Lo más importante es:

  • ¡Nuestros cuerpos son increíbles! Sí, tenemos diabetes, pero nosotros y nuestros cuerpos somos resistentes, inteligentes y fuertes.
  • No importa dónde te encuentres en tu travesía con la diabetes tipo 1, si te esfuerzas y ​​tienes determinación, es posible tener un embarazo saludable. La comunidad en línea de la que soy parte está llena de mujeres con muchas historias de adversidad, ya sea con respecto a su diabetes, su salud física o su salud mental. El tema común es que nos recuperamos a pesar de los obstáculos.

Mi consejo para todas las mujeres con diabetes tipo 1 que estén embarazadas o intentando concebir es este: no duden de sí mismas y no duden de su cuerpo. Aliméntenlo con amor y admiración porque es capaz de rendir más allá de nuestras expectativas.

 

ESCRITO POR Kimberly Bowen, PUBLICADO 01/20/21, UPDATED 02/24/23

Kimberly Bowen es la fundadora del blog de estilo de vida consciente Mind Music Spirit y trabaja en hostelería. Le gusta viajar, cantar y es una adicta a los productos para el cabello. Kimberly vive y trabaja actualmente en Florida. Puedes encontrarla en Instagram @mindmusicspirit o visitar www.mindmusicspirit.com para conectarte.