Vino y diabetes
Nota del editor: Este contenido forma parte de la Guía sobre alcohol y diabetes. Este contenido ha sido verificado por la Dra. Marina Basina, profesora clínica adjunta en la Universidad de Stanford. Ella es endocrinóloga clínica e investigadora con enfoque en manejo de la diabetes y tecnología para el manejo de la diabetes. La Dra. Basina es miembro activo de diferentes consejos directivos y médicos así como organizaciones comunitarias de diabetes. Además, ella es miembro del Consejo Científico de Beyond Type 1.
El vino es una elección popular entre los adultos. Si vives con diabetes tipo 1 o diabetes tipo 2 puedes tomar alcohol pero debes estar consciente de las características particulares de esta bebida alcohólica y cómo podría tener efecto en tus niveles de glucosa en sangre. Siempre consulta con tu médico si tu salud es lo suficientemente buena como para poder consumir alcohol sin problemas.
El contenido de alcohol en el vino es de 12-15 % y, por esta razón, el tamaño de la porción o trago es de 5 oz (147 ml aproximadamente).
La mayoría de los vinos tintos tienen menos de 5 gramos de carbohidratos por porción. Sin embargo, una copa de 3,5 oz de vino del postre puede llegar a tener hasta 14 gramos de hidratos de carbono.
Echa un vistazo a la tabla de carbohidratos para las bebidas de Beyond Type 1.
No bebas con el estómago vacío
No sólo el alcohol te emborrachará más rápido sino que después de un pico inicial tu glucosa en sangre descenderá rápidamente. Consumir algunos hidratos de carbono evitará que sientas que vas en picada como me pasó en Vernazza.
Hidrátate
Esto es importante para todos, no sólo para quienes vivimos con diabetes tipo 1. Beber agua, digamos 8 oz o un vaso de agua por cada vaso con alcohol, ayudará a que este se diluya en tu torrente sanguíneo. Si estás bebiendo algo azucarado como vino blanco barato, el agua ayudará a que tus niveles de glucosa en sangre no se eleven demasiado.
Monitorea frecuentemente tu glucosa en sangre
El alcohol podrá elevar tu glucosa, quizá la baje, pero sea como sea, el alcohol hará cosas extrañas en tu sangre. Para mantenerse a salvo de estos cambios, revisa tu glucosa en sangre con mayor frecuencia.
Siempre acompañado
Asegúrate de estar con alguien que pueda ayudarte en caso necesario y de que conozca dos o tres cosas de diabetes tipo 1. Tu acompañante deberá ser capaz de identificar los signos de hipoglucemia y deberá saber cómo ayudarte si tu glucosa baja demasiado.
No te excedas
El alcohol es una neurotoxina, así que trátalo de la misma manera como tratarías una serpiente venenosa o de plano aléjate de él. Cualquier exceso es una acción tonta y lo es aún más para quienes vivimos con diabetes ya que además tendremos que lidiar con niveles de glucosa impredecibles estando borrachos.
Wine has a great deal of mythology surrounding it, and occasionally you’ll see a headline like “Red Wine Benefits: 10 Reasons You Need a Glass Right Now” scuttle up your Facebook feed. There does seem to be some evidence that a moderate daily serving of dry red wine might help to stabilize BGLs, or at least won’t destabilize them.
El vino tiene mucha mitología a su alrededor y ocasionalmente encontrarás titulares como “Beneficios del vino tinto: 10 razones por las que necesitas tomar un vaso ahora mismo” en tu Facebook. Parece existir cierta evidencia de que el consumo diario moderado de vino tinto seco pueda ayudar a estabilizar tus niveles de glucosa en sangre, o al menos no desestabilizarlos.
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