Vigilar Nuestros Números ¿Siempre?
Los números con frecuencia tienen un impacto en nuestra salud emocional. Piénsalo, nuestras finanzas, nuestro peso, nuestras calificaciones escolares. Seguramente te has sentido preocupado luego de ver que en tu cartera hay menos dinero del que esperabas o quizá te haya pasado como a mi que de pronto me bajo de la báscula y el número no es el que yo esperaba. Ahora, si hablamos de números y diabetes Tipo 1 las cifras son sin duda una parte importante de nuestro día a día.
Vivir con diabetes puede desafortunadamente volver complicada tu relación con los números. Los números en cuanto a diabetes se refiere nos presenta diferentes oportunidades para realizar evaluaciones y análisis de nuestro manejo. Utilizamos datos como hemoglobina glucosilada, tiempo en rango, cifras de glucosa de nuestro medidor y si utilizamos un medidor continuo de glucosa el escenario se complica pues tenemos aún más números para ver y analizar todo el día.
Aunque quienes nos dedicamos a la educación en diabetes no nos cansamos de repetir que no debemos juzgarnos con base en los números, seamos honestos, es difícil lograrlo y requiere de un poco de trabajo.
El análisis de la data es un aliado importante pues será a través de ello que podremos hacer ajustes oportunos o incluso aprender a identificar situaciones, alimentos y otros que tengan impacto en nuestros niveles de glucosa en sangre pero todo este análisis también puede dar pie a que nos enfrentemos con diferentes emociones entre ellas algunas difíciles de manejar como: culpa, frustración y enojo.
Esta carga emocional puede aumentar el riesgo de burnout que como sabes es un sentimiento de hartazgo por el cuidado de la diabetes.
Cómo lo manejamos, dos consejos
Quienes somos: el número, sea 5.5 mmol/L100 mg/dL , sea 11.1 mmol/L200 mg/dL no cambiará quienes somos. Quizá cambie la forma en la que nos sentimos en el momento pero en realidad no cambia quienes somos. Seguiremos siendo las mismas personas que se esfuerzan muchísimo para manejar una condición tremendamente compleja y lo hacemos bien.
Minimizar el de estrés. Muchas veces ver nuestra cifra tiene un impacto en nuestro nivel de estrés. Podemos encontrar formas de aligerar este sentimiento por ejemplo convirtiendo esta medición en algo significativo y pensar no tanto en la causa sino en la solución. Como seguramente has notado no siempre encontraremos la causa pero centrar nuestra atención en el por qué puede puede tomarnos más tiempo que encontrar la solución. En este caso, junto con la solución aparecerá la causa. Por ejemplo: mi glucosa se elevó mucho después de comer. La solución es aplicar más insulina y seguramente tuve que hacerlo porque mi conteo fue poco preciso. Puedo elegir intentarlo de nuevo y aplicar una dosis de insulina distinta, o pedir ayuda para el conteo de ese alimento.
¿Y tú qué opinas? ¿Te has sentido así? ¿Has dejado de vigilar tu diabetes en ocasiones? ¿Qué opinas sobre el cuidado de nuestra salud mental?