Bomba de insulina, ¿puedo y quiero?
Afortunadamente la tecnología avanza cuando se trata del manejo de ciertas condiciones, y la diabetes no es la excepción. Has escuchado en este espacio sobre las microinfusoras de insulina (o bombas de insulina como les llamamos informalmente). En resumen, podemos decir que una bomba de insulina es un dispositivo electrónico que se encargará de dosificar insulina las 24 horas del día. Este dispositivo es pequeño y va conectado a nuestro cuerpo a través de una pequeña cánula por donde llegará la insulina.
Existen distintos tipos de microinfusora de insulina, algunas tienen tubos por donde viaja la insulina directamente del reservorio o contenedor de insulina en el dispositivo, y otras carecen de tubos y dosifican la insulina directamente a través de la pequeña cánula. La elección del tipo de microinfusora obedece a muchas variables pero quizá la más importante es la disponibilidad en el país donde vivas. Cuando hablamos sobre acceso a estos dispositivos también la respuesta dependerá del país de donde nos leas pues en algunos países estos dispositivos tienen un precio elevado y no todas las personas que vivan con diabetes tipo 1 podrán tener acceso a ellas. Es así que tenemos que seguir trabajando en labores de abogacía para hacer que esta tecnología y otras lleguen a manos de toda persona que las necesite.
Leemos en los medios y en opiniones de amigos expertos, que las microinfusoras de insulina podrían ser para todo el que viva con diabetes y utilice insulina en su tratamiento. Esto incluye a todas las personas con diabetes tipo 1, y algunas personas con diabetes tipo 2 y gestacional donde se busca un mejor manejo glucémico a través del uso de insulina. Pero, ¿soy candidato? Si estás pensando en cambiar tu tratamiento de múltiples inyecciones de insulina a microinfusora, toma en cuenta las siguientes características de los usuarios.
Análisis de datos
Las microinfusoras de insulina se encargan de la dosificación detallada de insulina. Con esto queremos decir que las dosis basales pueden ajustarse finamente para satisfacer las necesidades de la persona. Sin embargo, la microinfusora no hace todo por sí sola. Quien busca sacar el mejor provecho de un adelanto tecnológico como este, deberá ser capaz de realizar análisis de datos. Afortunadamente, se acabaron las épocas donde el registro y análisis de glucosa en sangre era manual (bitácora). Ahora hay sinnúmero de aplicaciones para facilitar esta tarea. No realizar un análisis de datos no nos permitirá realizar ajustes finos y terminaremos utilizando la microinfusora como una jeringa “electrónica”, muy costosa.
Explicar a terceros
Como bien sabes, con frecuencia tenemos que dar explicaciones a desconocidos acerca de nuestra diabetes. La buena noticia es que cada vez que explicamos algo que estamos haciendo (como medir la glucosa en público o inyectarnos insulina) estamos creando conciencia sobre la diabetes y alguien llega a su casa sabiendo un poco más sobre nuestra condición. Las microinfusoras o bombas de insulina son llamativas, algunos modelos se asemejan a un pequeño localizador y otras están adheridas a nuestro brazo o pierna, por lo que pasar desapercibidas no siempre es posible. Esconderlas no siempre es posible, así que si estás considerando utilizar una quizá quieras tomar en cuenta qué tan dispuesto estarás a dar una explicación. Muchos hemos encontrado que los beneficios de estas tecnologías opacan cualquier intromisión en nuestra vida personal.
Conteo de carbohidratos
Contar carbohidratos es una habilidad que facilita enormemente el manejo de la diabetes tipo 1 y a las personas con tipo 2 que utilizan insulina. Quienes ya estuvieron en tratamientos con múltiples inyecciones de insulina conocerán bastante sobre el conteo de carbohidratos pero definitivamente es un arte que se debe dominar cuando hablamos de microinfusoras de insulina. Puedes leer un poco más sobre este interesante tema aquí.
Educación contínua
Cuando utilizamos tecnología es porque estamos dispuestos a aprender todavía más (sí, dije más) sobre diabetes. En general, vivir con diabetes requiere de actualización constante para que así podamos tomar decisiones informadas que nos ayuden a retrasar o prevenir la aparición de complicaciones.
Trabajo en equipo
Sabemos de personas que utilizan estas tecnologías y que esperan un año para visitar a su equipo de profesionales al cuidado de la diabetes para realizar ajustes en sus dosis basales y otros. Lo cierto es que la diabetes se comporta de formas distintas cada día y nuestro cuerpo difícilmente reaccionará de la misma forma siguiendo patrones. Encontrar un médico, un educador en diabetes, y un experto en nutrición que estén dispuestos a trabajar en equipo y comunicarse continuamente, es de gran utilidad cuando hablamos de utilizar este tipo de tecnologías.
Estas tecnologías fueron creadas para ayudarnos y facilitar nuestro manejo. Esto no quiere decir que nos vayamos a olvidar de nuestra diabetes, pero seguramente encontraremos grandes recompensas como: menores episodios de hipoglucemia y menor variabilidad glucémica, así como más flexibilidad en nuestra vida diaria.