Confiar en la intuición para salvar la vida de Diego
Nota del editor: Los primeros síntomas o señales de advertencia de diabetes tipo 1 incluyen: sed excesiva, micción frecuente, pérdida de peso inexplicable y agotamiento. Busca atención médica inmediata si tú o alguien que amas presenta estos síntomas. Para obtener más información sobre las señales de advertencia de la diabetes tipo 1, CAD y ayudar a correr la voz para salvar vidas, consulta nuestra campaña de CAD.
1 mes atrás de su diagnóstico, había notado que estaba bajando mucho de peso y comía excesivamente y simplemente no entendía la relación. Pregunté incluso en la guardería si están comiendo bien y me decían que sí, todo parecía normal y sin embargo había algo que no lo parecía. Así pasó todo un mes y cada vez empeoraba ya que comenzó a vomitar lo que comía, orinaba frecuentemente a tal grado que tenía que cambiarle el pañal cada 15 minutos. Lo notaba muy irritado, lloraba por todo, decía que le dolía la cabeza y el abdomen. Su piel se notaba reseca, muy reseca y fue entonces que lo llevamos con su pediatra que nos comentó que era por el calor de la primavera lo cual hacía que tomara más más agua y eso provocaba orinar de manera frecuente.
Sabía que algo no iba bien
Como mamá sabía que algo no iba bien y no me quede conforme con esa respuesta. Lo llevé al Seguro Social donde me dijeron que se trataba seguramente de infección estomacal. Yo cada día veía peor a Diego. Estaba sin energía, le costaba trabajo respirar y nada de lo que le enviaban le ayudaba.
Volví con su pediatra y le pedí que le hiciera algunos estudios porque estábamos a unos días de salir de vacaciones a la playa y me daba miedo llevarlo así. Sabía que algo no estaba bien. Le hicieron los estudios y un día antes de salir de vacaciones el pediatra los revisó, fue entonces cuando vio sus niveles de glucosa y nos envió de inmediato a hospitalizarle.
Aprendizaje y organización
De ahí en adelante nuestra vida ha sido puro aprendizaje y re organización como familia, formar nuevos hábitos. Diego es un niño muy alegre a quien le gustan los gatos, le gusta mucho correr, que le lean cuentos y le canten canciones. Es por eso que nos caía de extraño su cambio de estado de ánimo porque pasó de ser muy amoroso y alegre a estar llorando todo el tiempo y sin ganas de jugar.
Diego actualmente tiene 3 años 6 meses. Él volvió a ser un niño alegre, inquieto, curioso, risueño, platicador. sociable. Ya no está molesto e irritable todo el tiempo. Su semblante es saludable y ha recuperado el peso perdido.
Confía en tu intuición como padre
Como recordatorio y recomendación para todos los papás les diría que confíen en su intuición de padres, que ante cualquier sospecha o conducta anormal que vean en sus hijos como vómito, cansancio, sed excesiva, orinar frecuentemente, baja de peso repentina acudan inmediatamente con un médico especialista e insistan en que se le hagan estudios pertinentes para descartar diabetes u otras situaciones. Como mamá siempre nos damos cuenta cuando algo no está bien con nuestros pequeños.
Educándonos para enfrentar un reto
Yo como mamá de Diego que vive con diabetes tipo 1 puedo decirte que en un principio fue muy difícil, sentía que el mundo se venía encima, tenía miedo sobre la salud de Diego y que no pudiéramos con este reto.
Pero a los pocos meses me di cuenta que lo único que podemos hacer para afrontarlo es educarnos. Aprender cada día un poco más para llevar un mejor manejo y eso a la vez me ha dado seguridad y esa misma seguridad es la que trato de transmitirle a Diego.
Día a día, quiero que él sepa y que vea la diabetes como algo que no lo puede detener, que sólo conlleva tener cuidados diferentes pero que no es nada más allá que eso. Ver que Diego dice “no gracias” cuando le ofrecen una paleta, me da fuerza y valor, él es mi más grande maestro.
Por favor comparte
Por último me gustaría agregar para todo el público en general que compartan, compartan, compartan. Esto lo menciono porque a la semana que diagnosticaron a diego, buscando información sobre diabetes tipo 1 encontré justo una publicación en esta página beyond con una historia de una niña la cual su diagnóstico fue muy similar al de Diego, ya en un estado crítico y si la gente compartiera ya sea que viva o no con diabetes esta información seguramente podría llegar a más personas y los diagnósticos no tendrían porque ser tardíos arriesgando la vida de los pequeños.
Si yo hubiera leído esa publicación 15 días antes del diagnóstico de mi hijo, probablemente no hubiera entrado al hospital en ese estado. Así que les pido que ya sea que vivan o no con diabetes tipo 1 es importante compartir la información sobre las señales de alerta.
Esta historia forma parte de los recursos de Beyond Type 1 sobre Cetoacidosis y manejo de cetonas: encuentra la colección completa de recursos aquí.