Christian Muñoz Araneda: maratonista y mucho más


 2023-01-03

En esta charla informal de sábado por la tarde, Christian junto con sus padres, Bernarda y Fernando, y su hermano Andrés nos cuentan sobre el camino recorrido desde Ecuador hasta llegar a correr el maratón de Nueva York.

BT1: ¿Cómo te presentarías a alguien que no sabe nada de ti? 

Christian: Primero que nada, mi nombre es Cristian, tengo 27 años, soy profesional del área de Recursos Humanos y me gusta mucho correr. 

¿Hace cuánto que corres?

Christian: Cinco o seis años, más o menos. Me diagnosticaron en el año 2000. Nunca supe lo que es no tener diabetes y desde chico me ha gustado mucho hacer deporte, jugar fútbol o hacer actividad física en general.

Y para los padres. ¿Cómo ha sido acompañar a su hijo en esta actividad deportiva y de competencias?

Bernarda: Fue muy difícil al principio y nos costó asimilar el diagnóstico. Pero uno sacaba fuerzas para que todo salga bien, para que él tenga su tratamiento y que haga deporte. A él siempre le gustó y jugaba fútbol, más que nada cuando pequeño, y después comenzó con las carreras. El ejercicio le beneficia para la diabetes en todo sentido y también le gusta, entonces ha tenido apoyo total en todo sentido

Fernando: Él comenzó con la diabetes a los cuatro años y medio, pero siempre fue muy independiente y a los 6 años me dijo: “Papi, me pongo solo”. Y desde allí se pone solito. Siempre ha sido muy independiente

Andrés, cómo hermano, ¿qué recuerdas de esa etapa?

Andrés: Recuerdo claramente la angustia, la incomprensión, la desesperación de saber qué hacer. Era el año 99. O sea, cero Internet, cero teléfonos móviles, cero globalización. O muy poco al menos. Yo recuerdo claramente en los veladores de mis padres o en la habitación libros y libros. Mi mamá es chilena y recuerdo claramente que Chile fue un punto importante, porque de allá venían libros y cierto conocimiento. Christian no sabe lo que es la vida sin diabetes. Entonces creo que eso le ha permitido tener la disciplina que tiene. La disciplina que tiene como diabético y que tiene como deportista y que tiene como persona más allá de cualquier cosa que todos tenemos. Él es disciplinado. Y hoy Christian es un ejemplo para todos nosotros.

Cada familia es un mundo y en este trabajar en equipo, trabajar todos juntos para acompañarlo a Christian en su desarrollo y en el logro de sus objetivos deportivos. ¿Cómo describirías el rol de cada uno? 

Christian: Creo que el soporte de mi mamá es el del día a día, el de estar, el de ver cómo estoy, muy pendiente de todos los detalles. Y mi papá me acompañaba e íbamos juntos a alguna ciudad de fuera, un soporte mucho más logístico, no hay carrera en la que no esté, en la que no hace las fotos, filme, etc., tanto en carreras de pista como en carreras de montaña. 

¿Cuál ha sido tu experiencia con los maratones? 

Christian: He corrido dos maratones. En Cuenca hace un año y en Nueva York el pasado noviembre.

¿Usas algún tipo de tecnología para el manejo de la diabetes? 

Christian: No utilizo los sensores de medición de glicemia y no utilizo bombas. Pero algún día.

¿Y cómo equilibras el manejo de la glucosa con las carreras? ¿Tienes algún truco?

Christian: Utilizo la típica maquinita para medirme, me pincho el dedo con la sangre, me mido el nivel de glicemia y me inyecto con jeringuilla la insulina. Básicamente es así mi administración de la diabetes y yo creo que he desarrollado un buen sentido de percibir cómo son mis niveles o mis síntomas de acuerdo a mis niveles. Obviamente no arranco una carrera sin hacer un control previo Procuro estar sobre los 150 y menos de los 230-220. Procuro estar en ese rango para poder iniciar y de ahí, ya con la experiencia que tengo corriendo, sé la intensidad a la que debo correr, cada cuánto tiempo administrarme un dulce, una tableta de glucosa, una guineo, una banana, algún alimento para sostenerme en el trayecto y no sufrir hipoglicemia. Y jugando también con la intensidad de la carrera, con el ritmo que estoy corriendo, la distancia. Es analizar muchos factores, pero al final llegas bien.

Christian, ¿crees que la diabetes te ha condicionado o te ha marcado un camino en el que sientes que tienes que superarte? O simplemente era el camino que ibas a seguir con diabetes o sin diabetes?

Christian: No, yo siempre he dicho que la diabetes condiciona, pero no limita. Yo he hecho lo que yo he querido a todo nivel: a nivel personal, deportivo, académico, profesional. En lo social no me he limitado nunca tampoco. Yo he concebido la diabetes como algo que está cerca mio siempre y acepto que está aquí, pero eso no me impide conseguir algo que quiero. Creo que es mi mentalidad frente a la diabetes. 

Andrés: También es importante decir que seis semanas antes de la carrera le diagnosticaron rotura parcial de menisco, con lo cual su preparación física fue alterada. Con una visión periodística, honestamente, pensé que tal vez no podría terminar la carrera. Pero lo consiguió. Para mí el mérito está en que inclusive una persona sin diabetes lo habría sufrido muchísimo.

¿Cómo definiría su familia a Christian? Y ¿cómo definirían el rol que cada uno ocupa en esta dinámica de acompañar al corredor profesional, como parte de su equipo de soporte?

Andrés: A Christian lo definiría como un ejemplo. Y yo creo que soy más un apoyo de planificación y de ideas. Un poco como estrategia. Y agregaría que como su equipo de soporte somos funcionalmente disfuncionales.

Bernarda: Como dijo Andrés, yo a Christian lo considero un ejemplo. Es un orgullo. Es un ejemplo por lo bien que lo ha hecho y como ha sabido asimilar su condición. Eso a mí me implica una tranquilidad total. Y yo para él pienso que soy un apoyo. Tanto físico como moral. Y siempre estoy a su lado, por más que él ya sea un adulto y se sepa manejar, siempre estoy ahí con él. En todo sentido.

Fernando: Yo diría que la disciplina. Y que tenga mi apoyo y que siempre trato de empujar para que vaya más allá, a cumplir más metas.

Christian, tu familia te considera un ejemplo, que les llenas de orgullo y que admiran tu disciplina. ¿Cómo sientes tú todo esto?

Christian: Con mi hermano tenemos algo de diferencia de edad y él siempre ha sido maduro y centrado y me ha guiado por buenos caminos. Y el apoyo y acompañamiento de mis padres ha sido siempre muy importante y lo agradezco mucho.

¿Quisieran agregar algo más?

Christian: Quisiera aprovechar para agradecer a mis padres por todo el apoyo de todos los días, cada uno desde su espacio, en función de su rol. Y compartir con las personas que tienen esta condición y sus familiares que la diabetes nos condiciona, pero no nos limita. 

Andrés:  Yo creo que al final del día, es un aprendizaje de vida. La diabetes de Christian lo marca a él, pero nos marca a todos desde nuestro rol, desde nuestra cercanía y al mismo tiempo desde la distancia, pero la situación es de todos. Y la verdad es que creo que ha sido una de las cosas importantes que, al menos a mi, nos ha servido para entender que en la vida siempre va a haber cosas y que hay que adaptarse. O sea, lo que comúnmente se dice: si la vida te da limones, haz limonada. 

Fernando: A través de Christian vemos el optimismo y es un ejemplo para la gente que tiene diabetes. Que se puede llevar una vida prácticamente normal. Que todo se puede.

ESCRITO POR Ana Álvarez Pagola (Borthwick) , PUBLICADO 01/03/23, UPDATED 01/04/23

Ana es la creadora de Yo Diabetes y vive con diabetes tipo 1 desde 2006. Es docente, y traductora, Paciente Experto en Enfermedades Crónicas por la Universidad Rey Juan Carlos y Educadora en Diabetes. Forma parte activa de la comunidad de diabetes en línea en las distintas plataformas buscando difundir información sobre diabetes que permita a más personas gestionar mejor su diabetes y los recursos disponibles. Es la orgullosa mamá de cuatro maravillosas personas.