Guía de diabetes tipo 1 para los amigos y la familia

 2017-10-31

Nota del editor: Este contenido forma parte de nuestras guías en Beyond Type 1 que incluyen además recursos para quienes tienen un ser querido con diabetes tipo 1. Revisa el resto de nuestras guías para diferentes personas en tu vida haciendo click aquí.


Tal vez sea el hijo del amigo en la vecindad o un miembro de la familia el que tenga diabetes tipo 1. Tal vez tú estarás a cargo de cuidar a alguien en algún momento o simplemente te interesa aprender más acerca de la diabetes tipo 1. Dale un vistazo a esta guía para ayudarte a copilotear por la diabetes tipo 1 siendo un amigo o miembro de la familia.

¿Qué es la diabetes tipo 1?

La diabetes tipo 1 es una condición autoinmune que afecta al páncreas de una persona. El páncreas es el responsable de producir insulina, una hormona que las personas necesitan para recibir la energía de los alimentos. Nuestro páncreas, por razones que no han sido identificadas, no produce insulina. Como resultado, necesitamos inyectarnos o dosificar continuamente insulina por medio de una bomba de insulina (microinfusora) y equilibrar cuidadosamente nuestras dosis de insulina con los alimentos y las actividades diarias. También debemos monitorear regularmente nuestros niveles de azúcar (glucosa)  en la sangre. La diabetes es un acto de equilibrio que no para, tipo 24/7, que debemos maniobrar todos los días. No hay manera de prevenir la diabetes tipo 1 y no hay cura (¡por ahora!).

¿Cómo se controla?

¡Nos las arreglamos con un poco de ayuda de nuestros amigos! Entre ellos están nuestro medidor de glucosa, la insulina, agujas y monitores. El medidor de glucosa es un dispositivo que mide los niveles de glucosa (azúcar) en sangre. Utilizamos un dispositivo que pincha el dedo y colocamos la muestra de sangre en una tira reactiva. De ahí, el medidor lee la tira reactiva y nos da un número en la pantalla.

Podemos administrar la insulina a nuestros cuerpos por medio de múltiples inyecciones diarias o por medio de una bomba de insulina.

Las inyecciones se administran a nuestros cuerpos por medio de plumas y agujas de insulina. Hay dos tipos de insulina que utilizamos. La insulina de acción rápida le da a nuestros cuerpos insulina de inmediato y se administra junto con las comidas o para corregir un nivel alto de azúcar en la sangre. La insulina de acción rápida se usa varias veces al día, dependiendo de cuándo comes. La otra es la insulina de acción prolongada, que se administra una vez al día. La insulina de acción prolongada es una insulina de liberación lenta que se administra a tu cuerpo en un lapso de 24 horas cuando es necesario.

Una bomba de insulina es un dispositivo que está conectado al cuerpo, ya sea por medio de un tubo o de forma inalámbrica. Con el control de un dispositivo, constantemente estás recibiendo insulina por medio de la bomba. Durante las comidas, podemos elegir la cantidad de insulina que hay que administrar, y el dispositivo ya está en nuestra piel y listo para administrar la cantidad necesaria.

¿Cuáles son los dispositivos que se utilizan?

El MCG (medidor continuo de glucosa) , o simplemente medidor continuo de glucosa, mide los niveles de glucosa en tiempo real durante el día y la noche. El sensor del MCG se inserta debajo de la piel para medir los niveles de glucosa en tejido líquido. El sensor está conectado a un transmisor que envía la información a un dispositivo de visualización. Es común que mucha gente reciba los resultados del MCG en su iPhone, Android o Apple Watch.

Una bomba de insulina es el otro dispositivo que se conecta al cuerpo y que administra insulina al cuerpo.

¿Qué se puede comer?

Las personas con diabetes tipo 1 pueden comer cualquier cosa que elijan comer, siempre y cuando se dosifiquen correctamente la cantidad de insulina necesaria para el alimento que se vaya a comer. Aunque se podría asumir que seguir una dieta estricta sin carbohidratos nos ayudaría, hay MUCHAS otras cosas que afectan nuestro azúcar en la sangre. ¡Todo con moderación!

Hay un punto medio feliz entre llenar tu refrigerador con los alimentos más saludables y comerte todas las donas, caramelos y chocolates disponibles. Para cualquier persona, comer sano es la mejor manera de sentirse mejor. Sin embargo, es importante que no se le obligue a nadie a optar por algún tipo de alimentos.

¿Cómo puede afectar a nuestro estado de ánimo?

Ten en cuenta que nuestro estado de ánimo podría basarse en los niveles de azúcar en la sangre, altos o bajos. Podemos volvernos muy testarudos o malhumorados, o quizás simplemente necesitamos una caja de jugo. La diabetes tipo 1 a veces puede ser estresante, así que ¡ten paciencia con nosotros! Estos son los síntomas de niveles altos y bajos.

  • Síntomas de niveles altos: náuseas, respiraciones profundas, confusión, piel ruborizada y caliente, somnolencia.
  • Síntomas de niveles bajos: temblores, piel pálida y sudorosa, dolor de cabeza, hambre, debilidad, temblores.

Tratamiento general

El día en la vida de alguien con diabetes tipo 1 implica pruebas frecuentes del azúcar en la sangre y tratamiento con insulina. El tratamiento con insulina no es una cura para la diabetes tipo 1; la insulina se usa para controlar nuestra azúcar en la sangre. Los niveles altos o bajos de azúcar en la sangre pueden ser comunes, incluso a diario.

¿Qué hacer en caso de emergencia?

En caso de una emergencia, hay pocas cosas qué hacer. Si alguna vez estamos desmayados o inconscientes, inmediatamente llama a los servicios de emergencia y reacciona a la situación como si estuviéramos “teniendo un nivel bajo” o experimentando una  hipoglucemia grave. Si estamos inconscientes, quizás tengas que administrarnos glucagón de emergencia. Si estamos conscientes, la glucosa de acción rápida debe tomarse inmediatamente. Es decir, cajas de jugo, dulces, tabletas de glucosa, o cualquier otro alimento o bebida azucarada que se pueda consumir fácilmente.

Principales preguntas o comentarios que se deben evitar

  1. “¿Puedes comer eso?”. Sí, podemos comer cualquier cosa siempre y cuando dosifiquemos correctamente nuestra insulina.
  2. A otra persona: “No dejes que (nombre insertado) coma nada de eso”. Evita tratar de microcontrolar nuestras dietas. Tenemos una buena comprensión de lo que los alimentos pueden hacerle a nuestra azúcar en la sangre.
  3. Confundir la diabetes tipo 1 y la tipo 2: Este es un error muy frustrante y común que es fácil de cometer por alguien que no está familiarizado con la diabetes. Lo más probable es que todas las bromas y referencias de las películas que has visto acerca de la diabetes son inexactas y exageradas.
  4. “No deberías comerte ese postre/pizza/pasta/comida dulce.” ¡Tal vez deberías confiar en que sabemos cómo controlarlo! ¡Podemos disfrutar de este tipo de alimentos!
  5. Azúcar versus carbohidratos: Si un alimento no tiene nada de azúcar, eso no significa que sea un alimento preferido que elegiría una persona con diabetes tipo 1. El “conteo de carbohidratos” es un término que utilizan las personas con diabetes tipo 1 cuando se decide cuánta insulina se necesita para una comida. En otras palabras, ¡mira los contenidos de carbohidratos y de azúcar de un alimento antes de decir algo!
  6. “¡Esto no tiene azúcar, así que puedes comerlo!” “Sin azúcar”, “bajo en grasa” y “bajo en carbohidratos” son etiquetas que pueden parecer ideales, pero pueden ocultarse con otros desencadenantes que pueden afectar nuestro nivel de azúcar en la sangre.
  7. “¡Pero tú eres tan sano y activo!”. ¡No nos dio diabetes tipo 1 debido a nuestras opciones de salud! Nos dio diabetes tipo 1 porque nuestros cuerpos físicamente no pueden hacer insulina.
  8. Cualquiera y todos los chistes como “acabo de comer tanto postre que me va a dar diabetes”. No son graciosos para nosotros, y tampoco son verdad.
  9. “¿Las inyecciones duelen?”. Somos personas muy fuertes, y estas inyecciones son una parte diaria de nuestras vidas. Cuidamos nuestros cuerpos y manejamos las inyecciones con valentía.
  10. Tratar de actuar como médico, nutricionista, consejero o enfermera.
    Cada rutina de las personas con diabetes tipo 1 es individual. Es frustrante cuando otras personas tratan de decirnos lo que podemos y no podemos hacer, o lo que debemos hacer si nos sentimos enfermos. Lo más importante que un amigo o miembro de la familia puede hacer es ser solidario y útil sin ser mandón.