Halloween: consejos para un día festivo sin tanto miedo

 2016-08-25

Brujas, duendes y demonios, ¡oh no! Snickers y Skittles y Twix, ¡oh no! ¿Te da miedo el Halloween y la afluencia de golosinas llenas de azúcar que circulan por el vecindario? ¡No te preocupes! Beyond Type 1 recopiló estos consejos para la diabetes tipo 1 en Halloween que te darán tranquilidad y mantendrán tus calabazas talladas con una sonrisa.

Habla con alguien al respecto

Haz un plan de acción con tu hijo (a) antes de las fiestas de Halloween. ¿Con cuántos caramelos se podrá quedar? ¿Qué se hará con el exceso de caramelos que no se vayan a guardar? Asegúrate de hablar con los maestros y las enfermeras de la escuela acerca de las limitaciones de consumo de golosinas de tu hijo(a) o acerca de los ajustes planificados.

Cambia el enfoque

Tener un niño con diabetes tipo 1 no significa que él o ella no pueda participar en el circuito de truco o broma, pero tampoco tiene que ser el centro de la festividad. Puedes planificar una fiesta de Halloween enfocada en los trajes y los juegos en lugar de que esté enfocada en recoger el botín de caramelos. Trata de servirle alimentos más sanos que no estén cargados de azúcar que aún abarquen el espíritu de la fiesta.

Lleva un control de tu inventario

Con respecto a los caramelos con los que se quede, ten en cuenta el contenido de carbohidratos y asígnales una etiqueta en bolsas de meriendas. De esta manera, tú y tu hijo(a) tendrán en cuenta constantemente el contenido de azúcar en las semanas siguientes si o cuando se los coma.

Opta por las golosinas pequeñas

Opta por las golosinas que tengan un tamaño pequeño ya que debido a que tendrán menos azúcar esto no afectará los niveles de glucosa en la sangre de forma tan dramática. También los puedes agregar a tus suministros de glucosa rápida para cuando los niveles de azúcar de tu hijo(a) se bajen. Los caramelos duros pueden ser especialmente buenos para cuando el nivel de azúcar baja, debido a los azúcares de acción rápida. Evita los chocolates para cuando le de hipoglucemia debido a que el alto contenido de grasa ralentiza la rapidez con la que los azúcares y carbohidratos pueden entrar en el torrente sanguíneo.

Haz intercambios

Los niños pueden intercambiar los caramelos por dinero en efectivo o juguetes. ¿Te gustaría expandir las tradiciones de Halloween? Háblales del “hada de Halloween” o de la “Gran Calabaza” que (bajo la oscuridad de la noche) recoge los caramelos que le ofrecen y en cambio le deja un regalo a tu hijo(a).