Diabetes, viajes internacionales y mantener la calma: Una historia de hipoglucemias en Nueva York


 2021-12-03

Salir de nuestra zona de confort no es fácil, máxime cuando vivimos con condiciones de salud. Si a eso le añadimos realizar un viaje es internacional justo tras de atravesar una pandemia que fue emocionalmente desafiante para el mundo, se dan los ingredientes para una combinación que ha de manejarse cautelosamente.

Esta es la historia de Mariel Belem, de Hidalgo (México). Ella es nutrióloga clínica, Educadora en Diabetes y  especialista en obesidad. En fechas recientes, Mariel Belem compartió con nosotros una experiencia inquietante que tuvo un final feliz y que nos recuerda que juntos, podemos hacer mucho, y que como comunidad no es opción dejar a nadie solo: hoy por ti, mañana por mí.

Turismo post – pandemia

Mariel Belem decidió emprender un viaje de turismo para conocer Nueva York. Ella vive con diabetes, por lo que planeó y preparó detalladamente su viaje e incluso dedicó esfuerzos adicionales para tener su glucosa en rango o más cercano a lo óptimo que pudiera. Por ello, unos  días antes de partir, realizó un cambio de insulina basal junto con su profesional de la salud ya que presentaba muchas hipoglucemias nocturnas.

Mariel Belem realizó así el cambio de insulina, y de inmediato comenzó a sentirse mal.   Ella nos platica que experimentaba náuseas y que no sabía si esto se debía a la insulina o a los nervios que le hacía sentir el volver a viajar. Ella no se dejó vencer por esto y emprendió su aventura. Llegó y se sintió mejor, pero al poco tiempo volvió a presentar aquellas extrañas “náuseas” y decidió volver a usar la insulina previa al cambio.

De los errores que podemos cometer todos

Al acudir a la farmacia a comprar la insulina que usaba antes, la compró en formato de pluma. Como ella la había utilizado antes en vial, pensó que la presentación había cambiado y no le dio mayor importancia. Sin embargo, este aparentemente inocente error tuvo unas consecuencias que tuvieron un efecto importante en sus niveles de glucosa: en medio del frío clima de Nueva York, no podía elevar la glucemia a la normalidad, ya que se había aplicado como basal una insulina de acción ultra-rápida. Pese a estar acompañada por su novio, confiesa que en cierto momento se sintió sola. También con miedo. Comía y comía y no lograba subir la glucemia. Agradece que hoy puede estar contando esto como una historia, y compartiéndolo con otros.

En medio de esta situación, y gracias a los lazos forjados por la comunidad en línea de diabetes contactó a Mariana Gómez,  a quien agradece su asistencia como coach y por estar pendiente de ella, porque se sentía sola, en otro país que no era el propio.

El tema de estar en un país extranjero no es menor, porque los sistemas de salud son distintos, los médicos no son los que te conocen o te tratan habitualmente, y el acceso a la medicación puede ser distinta. En el caso de Mariel Belem, por ejemplo, nos cuenta que ella necesitaba glucagon y no lo hubiera podido obtener en Estados Unidos, ya que allí es necesario contar con una receta y para ello un trámite administrativo importante, y ¿adivinen qué? Ella lo necesitaba en cuestión segundos y minutos, no de días y mucho menos de semanas.

Encontró asistencia remota por parte de su profesional de la salud en México y también intercambió información con sobre dónde y cómo encontrar profesionales de la salud que podrían atenderla en caso necesario. 

El miedo a la hipoglucemia

“Este tipo de eventos me hacen generar miedos incluso a la insulina. Genera desconfianza en uno mismo”, nos dice Mariel Belem, “he hecho una introspección. A final de cuentas es algo que nos puede suceder a todos”.

Es cierto. Nos puede suceder a todos, independientemente de lo  formados que estemos en diabetes o de los años de experiencia. De un error o un despiste nadie está libre. El miedo a la hipoglucemia es real y ha de tratarse con la seriedad, empatía y comprensión que merece.

Recomendaciones para quienes vivimos con diabetes

  1. Plan B y adicionales: Ser precavido siempre es una buena idea. Hemos hablado antes del equipaje de mano. En muchos casos este tipo de precauciones pueden aligerar mucho nuestra carga emocional. Y, particularmente luego de la pandemia, la emoción y los nervios son también considerables.  Revisa llevar contigo lo necesario incluyendo aquellas herramientas que pudieras requerir “en caso de emergencia” e insumos adicionales. 
  2. Turismo: Conviértete en experto en turismo. Investiga sobre las regulaciones sanitarias del país o estado que visitarás. Incluso sin salir de tu país de origen con frecuencia descubrirás que quizá no haya la misma facilidad para conseguir las tiras que utilizas o las insulinas que requieres. Verifica que lleves lo suficiente y verifica estas regulaciones. En países como Estados Unidos, es prácticamente imposible comprar algunas de las cosas que necesitamos si no contamos con una receta médica. Lleva contigo una receta actualizada de tu médico tratante de preferencia en el idioma del país que visitarás. Si bien esta receta no tendrá validez para hacer tu compra, ciertamente aligerará y facilitará mucho el proceso en caso de que necesitaras conseguir insumos.
  3. Comunidad: Las redes sociales nos han permitido conocer a otras personas con diabetes en diferentes países, estados y ciudades. Acércate a la comunidad, seguramente podrán ayudarte o te guiarán hacia recursos que puedan serte de ayuda en momentos de estrés.

Por último, sigue la recomendación de Mariel Belem: “Disfruta mucho”.  Definitivamente, en su caso los nervios le jugaron una mala pasada. 

Comparte tus experiencias con la comunidad, entre todos podemos aprender y brindarnos mano amiga, aún a distancia. Agradecemos a Mariel Belem por compartir con nosotros su experiencia y te invitamos a seguirla a través de sus redes sociales.

 

 

ESCRITO POR Lucía Feito Allonca de Amato/ Mariana Gómez, PUBLICADO 12/03/21, UPDATED 04/13/22

Lucy lleva 30 años viviendo con diabetes Tipo 1, tiene doble nacionalidad Española y Argentina y es Licenciada en Derecho por la Universidad de Oviedo. Forma parte activa de la comunidad en línea de diabetes, temática en la cual se mantiene permanentemente actualizada. También es paciente experto en enfermedades crónicas cardio-metabólicas por la Universidad Rey Juan Carlos y activista por los derechos de las personas del colectivo LGBTQ+.

Mariana es psicóloga y educadora en diabetes. Es la creadora de Dulcesitosparami, uno de los primeros espacios en línea para personas con diabetes tipo 1 en México. Ella fue diagnosticada con diabetes tipo 1 hace más de 30 años. Es mamá de un adolescente.