Navidad con calor
Al sur de la línea del Ecuador la época de Navidad es una época por demás calurosa. Y a los tradicionales festejos europeos, en América Latina le sumamos la cultura local.
Algunas cosas son iguales y la decoración navideña con sus tradicionales colores suele estar presente. Las luces navideñas son infaltables y también se suelen llevar también al exterior a balcones y jardines.
Pero otras cosas son distintas.
Los placeres del verano
Algunas ventajas de la celebración al inicio del verano es que los días son más largos y es posible aprovechar la oportunidad de extender las actividades al aire libre y celebrar con una barbacoa o asado al aire libre, con muchas ensaladas frescas y multicolores y, por supuesto, helado para el postre.
En las zonas costeras es común celebrar en la playa, con un picnic o una barbacoa. Y si el calor aprieta, algunos también tendrán la buena fortuna de poder disfrutar junto a una piscina, ayudando a mitigar las altas temperaturas.
¿Qué ajustes tendremos que hacer?
Por lo pronto, tendremos que cambiar los jerséis y suéteres tejidos con motivos navideños por ropa liviana y holgada, de colores claros y frescos.
No podemos descuidar el cuidado de nuestros pies y debemos tratar de elegir calzado que no produzca roces o posibles ampollas con el calor. Y aunque a la mayoría nos gusta caminar descalzos sobre la arena, debemos también tomar precauciones para evitar quemaduras o posibles cortes que nos puedan aguar las fiestas.
Nuestra glucosa en sangre
El calor definitivamente puede afectar el manejo de nuestros niveles de glucosa (azúcar) en sangre.
Las personas con diabetes pueden deshidratarse con mayor facilidad y esto puede aumentar el nivel de glucosa en sangre. Este nivel alto puede hacer que una persona orine con mayor frecuencia, lo que a su vez causa mayor deshidratación. Y esto puede producir hiperglucemia (niveles altos de glucosa en sangre). Conclusión: beber suficiente líquido, preferentemente agua.
Las altas temperaturas también pueden afectar la forma en que nuestro cuerpo usa la insulina y acelerar su absorción. Esto puede producir hipoglucemias (niveles bajos de glucosa en sangre) inesperadas y, en ocasiones, difíciles de tratar. Conclusión: puede ser necesario medir los niveles de glucosa en sangre con mayor frecuencia y ajustar las dosis de insulina según indique nuestro profesional de la salud.
¿Comer o no comer?
En Europa en Navidad hace frío. ¡Y mucho! Los días son cortos y no invitan a realizar actividades al aire libre. Los platos típicos de Navidad son platos cargados de calorías y carbohidratos. ¿Qué otra cosa podría esperarse de una celebración que marca el inicio del duro invierno?
Pero es un hecho que hemos heredado estas comidas europeas. Las distintas corrientes migratorias han llevado a América sus platos típicos para las fiestas desde España, Italia, Alemania, Rusia, Francia, Reino Unido, Ucrania, Rumania, y tantos otros… ¡Todos países donde la Navidad y el invierno van de la mano!
Para algunos renunciar a estas comidas puede significar un gran sacrificio y hasta deslealtad hacia las tradiciones familiares. Pero, ¿realmente las necesitamos o es saludable mantenerlas?
Con mayor frecuencia las familias que viven en el hemisferio sur de nuestro planeta suelen optar por un menú frío tipo buffet, con opciones bajas en carbohidratos, donde cada cual se sirve lo que desea comer, y que además tiene la ventaja de poder prepararse con antelación.
Y como con diabetes también tenemos que tener muy en cuenta la cantidad de carbohidratos que elegimos consumir, este tipo de comida nos permite armar nuestro plato con un poquito de todo y sin excedernos.
Aquí también encontrarás información útil sobre los platos típicos que se suelen consumir en estas fiestas.
¡Y si hay niños en la casa, Papá Noel, Santa Claus o el Viejito Pascuero nos visitará vestido con su tradicional traje, pero será una visita breve y en lugar de leche y galletas le ofreceremos una bebida refrescante gigante y sin azúcar!
